Cartagena, por su condición de puerto, en sí misma es una torre de babel.
Un corralito de piedra cosmopolita a donde llegan todo el año ciudadanos de todas las latitudes en busca del calor del Caribe y de la alegría de esa ‘raza’ llamada ‘Cartagena’.
En las calles de San Diego o Torices es común ver todo el año a rubias esculturales con poca ropa en busca de una playa o gringos o europeos, descamisados, con cerveza en mano dados a la fiesta.
Esa es Cartagena, el rincón del mundo que todo viajero quiere conocer.
Pero es durante el Mundial de fútbol cuando esa raza variopinta, con los rostros pintados de todos los colores y con las banderas de las selecciones de todo el planeta, se toman los bares y plazas de la Heroica para gozar con el deporte de masas.
Por ejemplo, En el Hard Rock Café, en la Plaza de La Aduana, por estos días es posible consumir un suculento calentado por 20 mil pesos y ver los partidos mañaneros.
The Clock Pub Bar, futbolero por naturaleza, en la Plaza de la Aduana, abrirá sus puertas en horas de la tarde para los ver los partidos y disfrutar los resúmenes internacionales dela Copa Mundo en compañía de una cerveza internacional.
Sin embargo es el barrio Getsemaní, con sus más de 100 hostales que albergan a viajeros de todo el mundo, el rincón que se convierte en el mejor estadio.
El tradicional bar ‘Los Carpinteros’ en el Callejón Ancho se ha convertido en el mejor rincón para escuchar música salsa y celebrar el triunfo del fútbol del mundo.
Así ocurrió el pasado domingo tras el triunfo de la selección Colombia, cuando cientos de cartageneros celebraron al lado de turistas llegados de todo el mundo.
La Caponera Bar, frente al parque Centenario abrirá para los partidos que son en horas de la tarde.
La Calle de la Media Luna, quizá el corredor más cosmopolita de todo Getsemaní, ya luce guirnaldas de colores y banderas que anuncian fiesta todos los días para los amantes del fútbol.
John Montaño
Redactor de EL TIEMPO
Cartagena
En Twitter: @PilotodeCometas
