Cuando la madre de Andrés Felipe Betancourt, de 19 años, le reclamó porque a su vivienda llevó a una chica a pasar la noche, donde también viven el hermano menor y la abuela de ambos, empezó una acalorada discusión.
Los ánimos se caldearon mucho más cuando la abuela del joven le preguntó por 600.000 pesos que no aparecían.
La gresca terminó, presuntamente, con golpes del muchacho hacia su propia mamá en la espalda, propinados con un trapeador. En la denuncia ante la Fiscalía también aparece registrado que habría lanzado a su hermano menor contra un armario, hiriéndolo, a su vez, en una oreja con un vidrio de un espejo que se rompió durante la pelea. Todo ocurrió en una casa de la calle 6G con carrera 51A, en el barrio Tierrablanca.
Por este ataque en esta zona en la ladera de Siloé, el Juzgado 21 Penal Municipal ordenó, la semana pasada, la medida de aseguramiento contra el presunto agresor de sus familiares, quienes, además, denunciaron que consume sustancias alucinógenas.
Es por ello que la Fiscalía le imputó el delito de violencia intrafamiliar.
En otro caso, una mujer es investigada por quemaduras a su hija de 11 meses con un líquido caliente.
Este hecho sucedió en Pradera, en el sur del Valle del Cauca. La familia dijo que la niña habría tirado el mantel donde había un recipiente con colada y se le habría derramado encima, de manera accidental. Pero la situación es tan grave para la bebé, con quemaduras de segundo grado en el rostro, el cuello y el tórax, que también se investiga, con el Instituto Nacional de Medicina Legal, lesiones en los genitales de la niña, además de abandono y negligencia por lo que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) está interviniendo.
Por ahora, la abuela por parte del padre está a cargo de la niña, mientras el ICBF indaga a la madre y a otros familiares. Según la primeras versiones, la niña habría sido sometida a maltratos desde mucho antes. Se habla que vienen desde febrero o de meses atrás.
En este panorama se incluye que el viernes, el Juzgado 21 Penal Municipal ordenó cárcel para Luis Alfredo Caicedo por presuntas lesiones a su mamá, en el barrio Alfonso López, en el nororiente caleño.
Cuatro días antes, el Juzgado 30 Penal Municipal ordenó captura en contra de Carlos Antonio Velasco y el Juzgado 11 Penal Municipal lo envió a la cárcel por el presunto homicidio en grado de tentativa agravado en concurso con hurto calificado agravado de su primo por robarle la motocicleta.
Estos casos en apenas una semana son parte de un preocupante balance porque, de acuerdo con Medicina Legal, en Cali se reporta un promedio diario de siete casos de violencia intrafamiliar con la violencia de parejas. En el Valle, ese promedio es de 12 diarios.
Solo entre enero y abril pasados hubo 856 agresiones de violencia intrafamiliar en Cali (623 entre parejas y 233 a otros familiares), sin incluir las causadas a los niños. En todo el Valle, según Medicina Legal, hubo 1.552.
El año pasado, el Observatorio de Seguridad de Cali informó 10 homicidios por violencia intrafamiliar, cuatro más que en 2017 entre 306 homicidios por convivencia. Pero se pasó de 387 hace dos años a 306, el año pasado.
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