El Hospital Universitario de Sincelejo (HUS) fue escenario de la noticia nacional más importante del presente año, pero esconde una tragedia económica igual que al menos una veintena de instituciones de la salud en todo el país.
Al HUS llegaron autoridades nacionales encabezadas por el Presidente de la República, Iván Duque; el ministro de la Salud, Fernando Ruiz; y la vicepresidenta de la República, Marta Lucía Ramírez, así como medios de comunicación nacionales, para asistir a la aplicación de la primera vacuna contra el coronavirus que recibió la población colombiana.
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De ese primer lote de 50 mil biológicos que llegaron al país de la farmacéutica Pfizer, la primera vacuna fue para la enfermera jefe de este centro médico, Verónica Machado.
En las últimas horas el Hospital Universitario de Sincelejo ha copado la atención de los medios de comunicación por este hecho y está en el foco de la opinión pública.
Sin embargo, este hospital de mediana y alta complejidad esconde una tragedia, como muchos hospitales en el país: una profunda crisis económica que lo tuvo cerca de cerrar.
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De hecho, hoy el HUS está intervenido por la Supersalud, que lo sacó a flote en medio de crisis exacerbada por la pandemia.
«El hospital ya no podía cumplir con sus funciones como prestador de servicios de salud debido a las deudas millonarias y embargos… no tenía flujo, ni cómo responder por sus obligaciones«, le dijo a EL TIEMPO Inés Loaiza, agente interventor de la Supersalud para el HUS.
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Protestas frente al HUS por parte de trabajadores de la salud.
John Montaño/ EL TIEMPO
Este hospital lleva intervenido un año y 10 meses, al cabo de los cuales, pese a mantener su planta de personal, tuvo que prescindir de profesionales y personal de la salud contratista.
Y a pesar de que los últimos meses han sido cancelados a los trabajadores, hay deudas pendientes de entre 3 y 40 meses… esos mismos hombres y mujeres de blanco que están frente a la primera línea de batalla contra la pandemia, hoy batallan para que les paguen los sueldos adeudados.
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El hospital ya no podía cumplir con sus funciones como prestador de la salud debido a las deudas millonarias y los embargos… no tenía flujo, ni cómo responder por sus obligaciones
Hoy, este hospital tiene deudas que superan los 96 mil millones de pesos.
«Cuando lo recibimos las deudas superaban los 120 mil millones de pesos, pero se le hizo una inyección urgente para que la institución pudiera estar en condiciones de prestar los servicios de salud», recuerda Loaiza, agente interventora.
El Fondo de Salvamento, del Ministerio de Salud, dispuso para el Hospital Universitario de Sincelejo 18.955 millones de pesos, de los cuales 13 mil ya fueron inyectados el pasado mes de diciembre, según la Supersalud.
«Para mejorar el flujo de cartera se han invertido recursos para infraestructura y dotación de equipos médicos con el fin de optimizar servicios», recuerda la agente interventora.
Para mejorar el flujo de cartera se han invertido recursos para infraestructura y dotación de equipos médicos con el fin de optimizar servicios
La llegada de la pandemia en marzo del 2020 fue un impulso para el vetusto hospital de los sincelejanos que, gracias a la intervención, pudo afrontar la dura batalla contra el coronavirus.
«Tenía 7 camas para unidades de cuidados intensivos (UCI) y hoy tenemos 30; en cuidados intermedios pasamos de 3 a 7 camas. Además, contamos con 18 camas para hospitalización y durante la pandemia se habilitó una zona únicamente para covid», recuerda la agente interventora.
Loaiza señala que pese a que todo el personal de planta tiene al día sus sueldos, aún se le debe a contratistas.
Tenía 7 camas para unidades de cuidados intensivos (UCI) y hoy tenemos 30; en cuidados intermedios pasamos de 3 a 7 camas. Además contamos con 18 camas para hospitalización…
Para que este hospital siga en acenso necesita más plata, porque las deudas millonarias están ahí, y de bajar la guardia, el hospital donde fue aplicada la primera vacuna contra el coronavirus podría cerrar.
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«Aún hay deudas acumuladas de antes de la intervención, y aún están por pagar entre el 45 o 50 por ciento de las deudas del pasado», concluye la agente interventora.
La funcionaria aseguró que incluso a algunos de los médicos y personal de la salud que fueron vacunados contra el covid- 19 el pasado miércoles se les adeudan dineros.
John Montaño
Enviado Especial de EL TIEMPO
Sincelejo
En Twitter@PilotodeCometas
