Inicio Colombia La jubilación con honores de Iron y Paco

La jubilación con honores de Iron y Paco

Iron un belga malinois, especializado en la detección de narcóticos, y Paco, otro belga malinois, experto en la búsqueda de explosivos, después de ocho años al servicio de la Base Aérea Marco Fidel Suárez, se retiran.

“Da mucha nostalgia que se vayan después de tanto tiempo y tanto cariño, nostalgia por entregarnos tanto a la Fuerza Aérea”, decía Néstor Gómez Rivero, técnico tercero encargado de los caninos en la Escuela.

La nostalgia fue evidente durante la despedida de los caninos.

Foto:

Juan Pablo Rueda Bustamante / EL TIEMPO

Iron y Paco fueron despedidos con una ceremonia honorífica, donde militares y civiles se formaron para decirles adiós. Los caninos recibieron sus respectivos pendones de tiempo de servicio.

El belga malinois es una raza resistente al clima frío y al clima cálido y es muy enérgica para las operaciones militares.

Estos caninos trabajan dos horas diarias por ocho de descanso; se encargan de revisar los paquetes, vehículos, objetos abandonados, jardines y parques, en Cali y fuera de la ciudad, donde los necesiten.

Su entrenamiento dura un año y prestan su servicio durante ocho años.

En la Escuela Militar de Aviación disponen de patios de recreo y de guacales que funcionan como cuartos de descanso.

Los caninos son entrenados en la Base Aérea de CAMAN, en Madrid, Cundinamarca. Ahí, permanecen entre ocho o nueve meses, según la especialidad, antiexplosivos, antinarcóticos o divisas; después van a las diferentes Bases.

Por lo general, son entrenados tres veces a la semana, en obediencia básica, y en reforzamiento de sustancias.

“La pelota es el premio del canino, al encontrar la sustancia son recompensados con el juego por parte del guía, que es un sistema de cobro”, contó el técnico Gómez Rivero.

La pelota es el máximo estímulo que tienen los perros quye son entrenados en diferentes labores, pues el juego es lo que más les llama la atención.

Foto:

Juan Pablo Rueda Bustamante / EL TIEMPO

Iron y Paco descansarán donde una familia que los adoptó y en la Escuela Militar Marco Fidel Suárez quedarán, otros belgas malinois.

“Paco nos dio la gran seguridad, a todo el personal de la Base Aérea, de que nunca íbamos a tener un explosivo en la Base o en los alrededores; con Iron, fue la seguridad de cero sustancias dentro y fuera de la Base”, señaló el técnico Gómez Rivero.