Inicio Colombia Los falsos religiosos que están en prisión por explotar a venezolanos

Los falsos religiosos que están en prisión por explotar a venezolanos

A la cárcel distrital El Bosque de Barranquilla fue enviado el lunes José Luis Aduén Uribe, capturado la semana pasada luego de haber sido encontrado por la Policía en una casa del barrio Los Andes al frente de un presunto negocio de explotación sexual de venezolanos.

Aduén es procesado por concierto para delinquir y explotación sexual. La Fiscalía detalló que él y otras cuatro personas manejaban el negocio del sexo por webcam con unos 20 jóvenes venezolanos, el cual les dejaba $ 50 millones mensuales.

En menos de una semana se conocieron dos casos de explotación sexual de venezolanos y en el mismo barrio de Barranquilla.

Y es que al hallazgo de la vivienda donde los jóvenes eran obligados a desnudarse y realizar actos sexuales frente una cámara, se sumó la captura, el viernes, de Javier Antonio López Bermúdez, presunto administrador de un negocio similar, a costa de 30 extranjeros, entre mujeres y hombres.

La Policía reportó que allí funcionaba el ‘Estudio Star moden vip’. López, de 29 años, fue enviado a la cárcel Modelo de Barranquilla por trata de personas.
Según investigaciones, las personas que vivían allí dormían en condiciones inhumanas en dos pequeñas habitaciones. Además, hacían turnos de seis horas de trabajo por seis de descanso.

En el lugar, las autoridades encontraron que, además, se elaboraban cédulas colombianas a los venezolanos para que trabajaran en las páginas de internet.
López, quien fue rey Momo cívico del Carnaval, tiene seis anotaciones judiciales por el delito de captación masiva de dinero y por estafa.

Y es que en 2016 el capturado fue denunciado por varias personas en Bogotá por ese último delito. Según los afectados, López Bermúdez llegó al barrio San Jacinto de la capital del país y se presentó como presbítero de la iglesia anglicana, falsa identidad con la que aprovechó para decirles a las personas que el Arzobispo de una Catedral de Inglaterra lo había enviado para recuperar la espiritualidad de los bogotanos.

Les decía que podía ayudarlos a obtener casa propia a través del Fondo de Vivienda, haciéndolos pasar como víctimas desplazadas por el conflicto.

En las denuncias reposa que los afectados, en su momento, le entregaron $147 mil por persona para aspirar a las supuestas casas.

Este segundo caso de trata de personas en un mismo barrio guarda similitud con el primero en que tanto Aduén Uribe como López Bermúdez se hicieron pasar por falsos representantes de comunidades religiosas.

BARRANQUILLA