Un corredor vial de 650 metros de extensión en el barrio Nacederos tiene optimistas a los habitantes de este sector de la comuna Ferrocarril, en Pereira. De hecho, aspiran a que la transformación de esta zona por esta obra y por la que también esperan mejoras en la vía de acceso al barrio sea el inicio para que Nacederos empiece
a dejar atrás problemas sociales tan graves, como la delincuencia, los riesgos de consumo de drogas, además de deserción escolar, desempleo, violencia intrafamiliar, entre otros.
Ese optimismo lo reflejó la población el pasado 29 de noviembre con la entrega de ese tramo de 650 metros de longitud. Nacederos, como lo dicen sus moradores, nació en 1967 a pulso y con tesón. Empezó como un pequeño caserío que luego fue vereda hasta llegar a ser un barrio, donde hoy sus familias tienen expectativas con estos trabajos que generarán conectividad con la tradicional avenida 30 de Agosto.
Allí están pendientes otros 200 metros para dar una cara diferente a la entrada de Nacederos. Las obras vienen desde marzo de este año dentro del tercer frente que se propuso que comprende el mejoramiento del acceso oriental, el cual consiste en completar el circuito de la doble calzada, iniciando y terminando en la Avenida
30 de Agosto.
La obra del barrio está dentro del proyecto ‘Construcción del acceso al aeropuerto internacional Matecaña desde la intersección con avenida 30 de Agosto – barrio nacederos hasta la actual vía de urbanismo (doble calzada)’. Todo el proyecto tenía un costo inicial de 7.426 millones de pesos y ahora, en la página de Colombia Licita
aparece con el monto de 8.827’254.140 pesos.
Para el acceso al aeropuerto Matecaña, de acuerdo con Mauro Correa, gerente de esta terminal aérea, se compraron 20 casas, pues los trabajos implican una ampliación de la vía que se unirá a la avenida 30 de Agosto y a Nacederos. Los predios se compraron hace ocho meses y desde entonces se han ido cambiando adoquines por una
capa asfáltica gruesa. También se han hecho cambios de redes de acueducto y alcantarillado con sumideros y se reemplazó el alumbrado de Nacederos de luz amarilla por la blanca o led.
Correa expresó: “De esta forma, cumplimos con lo establecido por el suspendido por la Procuraduría alcalde Juan Pablo Gallo de diseñar un plan de inversión con recursos de la entidad para mejorar el acceso al aeropuerto, el cual se puso en marcha desde finales del 2018, con la apertura y adjudicación de tres frentes de obra, para completar de manera integral la modernización y entregarlo a los pereiranos como uno de los más seguros y competitivos del país”.
Los otros dos frentes de ejecución son la construcción de tramo que arranca en la nueva glorieta de la doble calzada hasta el puente de acceso del nuevo edificio de pasajeros y el segundo es el mejoramiento del acceso por el lado occidental. Este consiste en pavimentar 1.200 metros que van desde el barrio Matecaña hasta
el barrio La Libertad.
Cuando iniciaron las obras el alcalde Gallo, señaló que este proyecto era ambicioso porque el acceso occidental del Aeropuerto que favorecerá mucho a la Comuna Ferrocarril porque tiene un componente social muy importante. Esta obra, según la Alcaldía municipal, está contemplada para generar un impacto positivo para los habitantes de Nacederos y también de Matecaña y La Libertad, porque servirá en la movilidad de los habitantes del occidente de la capital risaraldense al aeropuerto. Los que viven en Cerritos, La Villa o Cartago, entre otros, a su vez, podrán llegar con menor tiempo de desplazamiento.
Rafael Alberto Herrera, uno de los ingenieros de la obra, señaló que en 20 días entregará la vía que conecta la doble calzada con la entrada principal del barrio, ya que la prioridad es la doble calzada. “Hay que recalcar, que hemos tenido contratiempos como lo es el invierno, nos ha afectado y por la misma circulación
del barrio, debemos respetar ciertas vías de acceso”, sostuvo el profesional.
Edwin Andrey Ramírez, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Nacederos, reconoció que esta obra puede embellecer el barrio con su transformación urbanística. No obstante, resaltó: “Esto beneficia solo al aeropuerto, en acceso, en ser más confortable para los pasajeros, estructuralmente mucho mejor”.
El líder, que lleva 20 años en Nacederos y es licenciado en Ciencias Sociales, enfatizó en que “la comunidad ha tenido traumatismos, como bloqueos de las vías, el trabajo con maquinaria pesada ha generado daños estructurales en algunas viviendas”.
Añadió que se ha generado lodo, tras precipitaciones. Dijo, además, que en la carrera 11 entre calles 62 y 63, “los obreros quitaron el adoquinado que había y dejaron el terreno destapado. Esto ha limitado el tránsito peatonal, el paso del vehículo recolector de la basura, de los vehículos que proveen las tiendas, el transporte público”.
Uno de los habitantes de Nacederos es Jesús María Grajales. Contó que llegó porque el trabajo en el campo se había acabado. “Yo no sabía qué hacer. Así que, más o menos en 1994 me vine a Pereira donde un primo a pasear. Él me ofreció trabajar en la tienda de él y luego, él cayó en bancarrota. Logré prestar dinero para surtir una tienda y ahí empezó mi vida en el barrio”, dijo. Aseguró que Nacederos le brindó una oportunidad para mejorar su vida y la de su familia. Allí tiene una tienda, donde vende desde dulces, gaseosas hasta alimento para gatos y perros; y dueño de una recuperadora
de reciclaje de todo tipo de materiales, cartón, hierro, aluminio entre otros. Es así que los días pasan y la historia aún se sigue escribiendo.
Sus manos retratan el trabajo de más de 60 años de vida. Su cabello blanco, y su cuerpo delgado y de 1,70 metros de estatura revelan la experiencia de un hombre luchador por el barrio.
Juan Diego Usma, otro habitante del barrio, dijo que “independientemente
de que esta obra traiga progreso, las costumbres y las tradiciones se perdieron. Hay gente que se ha ido y ya no se ve el mismo arraigo, identidad ni preocupación por el barrio. Además, la Policía no hace suficiente presencia”.
NATALIA CHAVERRÍA SEPÚLVEDA
PARA EL TIEMPO PEREIRA