A 19 años de prisión fue condenado Ángel Burgos Vargas, quien fue hallado culpable del delito de acceso carnal violento agravado cometido de manera repetitiva contra sus tres hijos menores de edad, dos niñas y un niño.
El hombre, de 49 años, golpeaba severamente a los niños si se negaban a sostener relaciones sexuales o a dejarse tocar de él, por lo que tenían que acceder a sus peticiones.
La condena la emitió el Juzgado Primero Penal del Circuito de Ibagué , Tolima, luego de que la Fiscalía demostrara su responsabilidad en los vejámenes sexuales a los que sometió por varios meses a sus hijos.
Los hechos sucedieron en zona rural del municipio de Rovira en el año 2014 y fueron conocidos por las autoridades gracias a una denuncia realizada ante una Comisaría de Familia
Un familiar de las víctimas aseguró en ese entonces que sus sobrinos venían siendo víctimas de agresiones sexuales
«Un familiar de las víctimas aseguró en ese entonces que sus sobrinos venían siendo víctimas de agresiones sexuales por parte de su propio padre», dijo la Fiscalía y a través de un despacho seccional, adscrito al grupo Caivas (Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual), se iniciaron las indagaciones con lo que se pudo comprobar la participación del padre en estos hechos.
Una de las niñas, que hoy tiene 18 años, contó que su padre las violaba y las maltrataba permanentemente en la casa donde vivían sin su madre. Agregó que las agresiones sexuales comenzaban apenas cumplían los 12 años y que su hermano también fue víctima.
Tras comprobar los hechos, el ente acusador obtuvo la condena por el delito de acceso carnal violento agravado con menor de 14 años en concurso homogéneo y sucesivo.
La condena la paga Ángel Burgos Vargas en la cárcel Picaleña, de Ibagué.
IBAGUÉ
