La formalización de los vendedores ambulantes que se suben al MIO e invadieron las estaciones del sistema es la propuesta que tiene Metrocali para disminuir este impacto. Se les carnetizará y portarán un chaleco que los identificará, la idea es que coticen a seguridad social, que impulsen sus propios emprendimientos y que, mientras hacen la transición, no olviden que los espacios del MIO que ocupan son solo pasajeros.
“Este piloto arranca con 583 vendedores ambulantes que pasaron por una ruta de regulación que se diseñó cumpliendo los mandatos de la Corte Constitucional, camino en el que se comprometieron los vendedores a acatar en todo momento un reglamento establecido por Metrocali y, por supuesto, el Código Nacional de Policía”, explicó Nicolás Orejuela Botero, presidente de Metro Cali.
El programa comenzará en firme este 30 de mayo y tiene una duración de un año, prorrogable de acuerdo con sus indicadores de éxito: Reducción de los vendedores ambulantes que hacen parte del programa, que encuentran otra fuente de ingresos fuera del espacio público del MIO y la satisfacción del usuario del MIO.
“Esa iniciativa la tenemos nosotros hace tiempo, se la hicimos a ellos; proponíamos crear una cooperativa y que, desde el eje cultural de Metrocali, se les pagara; hay un rubro que se llama ‘cultura ciudadana dentro del presupuesto”, señaló Jorge Vélez, quien preside la Liga de Estudiantes Usuarios del MIO.
“Está bien que formalicen a los vendedores ambulantes porque controlarlos es imposible; si se logra, Metrocali tendrá el manejo de ellos que hoy no tiene. El problema es que dejaron a los artistas por fuera, que son los que más entran al sistema”, agregó Vélez.
La aceptación del programa de formalización, pero con condiciones.
Infografía CEET
De acuerdo con el estudio de caracterización de estos vendedores realizado por la Universidad Icesi, el 60 por ciento presta servicios artísticos; un 50 por ciento ha acudido al gota-gota y la mayoría son de los estratos 1 y 2, aunque también se encontraron del 3 y 4.
Un 45 por ciento vende cigarrillos y confitería, un 19,4 por ciento comidas preparadas.
“Considero que si Metrocali lo ha diseñado para ayudar a la gente, ellos tienen el derecho de hacerlo porque son una empresa, pero viene un problema de carácter social porque no es solo el joven el que se sube a cantar, hay jóvenes sin oficios, sin oporunidades”, dijo Javier López, veedor de vendedores informales.
“Ese proyecto de Metrocali debe ser complementado con verdaderos programas sociales y de intervención sicosocial de la Administración Municipal, pero no quedarse solo con acciones de Metrocalil”. agregó.
Lo que ofrecen los vendedores ambulantes, según estudio de caracterización.
Infografía CETT
Estos vendedores deberán comprometerse con estudiar, capacitarse y tener buenas prácticas en el manejo de alimentos.
Se censaron 769 vendedores ambulantes, pero solo se acogieron 583; el resto, según Metrocali, son manejados por ‘mafías’ que les cobran por el espacio público.
Hay un 2,0 por ciento de estos vendedores que tienen entre 79 y 88 años; un 5,0 por ciento entre 78 y 69 y 14 por ciento entre 68 y 59, para ellos diseñaron unos ‘carritos’ para la venta de mecato.
El 43,7 por ciento de estos vendedores corresponde a mujeres.
Los beneficios de este proyecto no los veremos de un día para otro sino que se irán dando gradualmente
«Buscamos garantizarle a nuestros usuarios tranquilidad dentro del sistema; hablamos con los vendedores, 75 por ciento de ellos accedió a hacer parte del programa, los que no, no tendrán beneficios ni acceso al MIO», dijo Orejuela.
Frente a los venezolanos que venden en el MIO, ya se le informó a la Cancillería y la Organización Internacional de Migraciones sobre esta situación. Orejuela insistió en que este programa es solo para los que se inscribieron.
