Este lunes la constructora del polémico proyecto multifamiliar Aquarela, que busca construir 6 torres para apartamentos a una cuadra del emblemático Castillo de San Felipe de barajas, joya patrimonial de Cartagena, presentó ante el Ministerio de Cultura una propuesta para desenredar los líos de la obra.
Durante la primera mesa de conciliación con el Ministerio de Cultura y la Alcaldía de Cartagena realizada en 2019, la constructora propuso pasar de ser un proyecto con 6 torres de 30 pisos, a uno de 5 torres de 20 pisos cada una.
De tal manera que, según la Constructora Calle 47 S.A.S, se dejarían de construir 130 de los 956 apartamentos planteados inicialmente, para así bajarle la altura a las torres que amenazan con quitarle perspectiva visual al Castillo San Felipe.
No obstante, ni el Ministerio de Cultura, ni el Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena, IPCC, aseguraron haber recibido por escrito la propuesta de la constructora.
Cabe aclarar que el Ministerio tiene hasta el próximo 6 de febrero para definir si acepta o no la propuesta planteada por la empresa que ejecuta la polémica obra que puso en peligro la declaratoria de patrimonio inmaterial de la humanidad que hoy ostenta Cartagena.
“Pese a que Cartagena hoy no se encuentra en la lista de ciudades en riesgo de perder su declaratoria patrimonial, de no llevar a cabo acciones para protegerla, sí podría ingresar en esta lista en la próxima cumbre mundial del patrimonio que la Unesco celebrará en junio del 2019, y posteriormente podría perder dicha declaratoria”, le dijo a EL TIEMPO Alberto Escovar, director de patrimonio del Ministerio de Cultura.
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