El pasado 20 de noviembre, en horas de la noche, en Abrego, Norte de Santander, ocurrió un incidente que puso a los habitantes de la comunidad en una fuerte tensión.
Todo inició cuando un grupo de bailarines realizó una muestra artística, justo a la misma hora que el sacerdote de la región, identificado como Jesús Emel González, realizaba una eucaristía en la parroquia Santa Bárbara, la cual. al parecer, se vio interrumpida por el sonido del evento.
El acto cultural, organizado por la academia de baile ‘Charlott’ de Abrego, reunió a muchos de los pobladores en el parque principal Guillermo Quintero Calderón, quienes disfrutaron de la muestra artística denominada como ‘Noche de talentos’.
Según explicó el sacerdote, la música del encuentro artístico tenía un volumen muy elevado, por lo que tocó cerrar las puertas de la iglesia. Fue tal la molestia del líder religioso que maldijo a los bailarines, situación que reprochó la comunidad.
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Las declaraciones del sacerdote
El padre Jesús Emel González dijo: “Es una falta de respeto, una parranda de desgraciados porque desgraciado es el que ha perdido la gracia de Dios y que no valora ni respeta la eucaristía”.
Que ellos mismos y que la misma vida les entregue a ellos el daño que le están haciendo al pueblo
Además, señaló que las personas que estaban en el parque habían perdido la gracia de Dios.
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“Y todos los que están en el parque han perdido la gracia de Dios, no respetan el sagrado sacrificio eucarístico, deberían esperar al menos a que termináramos la celebración de la eucaristía”, señaló el religioso.
Pero sin duda lo que más llamó la atención fue que el líder también dijo: “A los organizadores una maldición y que ellos mismos y que la misma vida les entregue a ellos el daño que le están haciendo al pueblo”.
Esto claramente incomodó a la comunidad. De hecho, el sacerdote realizó unas disculpas públicas que fueron compartidas en las redes sociales.
‘Quiero pedir perdón por las palabras fuertes’
El video fue publicado el pasado 21 de noviembre en las páginas oficiales de la parroquia.
Según el comunicado, el religioso ofreció disculpas y contó lo mal que se sintió al ver que otra actividad interrumpió el encuentro espiritual.
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“Quiero pedir perdón por las palabras fuertes, duras y displicentes que pude haber pronunciado contra todas las personas que departían en el parque principal, quienes estaban acompañando a sus hijos en una demostración artística, no hay duda de que movido por un gran dolor sacerdotal porque en el momento de la consagración, 7:30 de la noche, irrumpió una gran música fuerte y nos tocó cerrar las puertas de la iglesia”, contó el padre.
Respuesta de la institución Charlott
Las directivas de la academia también realizaron un comunicado como respuesta a las palabras de arrepentimiento del padre.
Conforme a la notificación, la escuela concedió también unas disculpas por realizar el evento en simultáneo a la misa.
Además, agradeció el gesto que tuvo el sacerdote Jesús Emel González y destacó que las dos instituciones tienen el mismo objetivo: “Ayudar a que los niños, niñas y jóvenes encuentren un camino que les brinde felicidad enmarcados en el bien, en el amor y la paz”.
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