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Un año de modernización y transformación / Columna de opinión

Este miércoles se cumple el primer año de implementación del proceso de Modernización y Transformación Institucional (MTI), ‘Inspirados en Usted’, hoja de ruta de la Policía Nacional para responder a los desafíos de una nueva Colombia, un país en proceso de normalización tras 53 años de conflicto armado, que dejó más de 8,4 millones de víctimas, entre ellas 47.000 policías.

Para estar a la altura de las demandas del posconflicto y fortalecer la convivencia ciudadana, la Institución, integrada por 180.000 hombres y mujeres, puso en marcha el 21 de marzo de 2017 el proceso MTI, que contempla 15 líneas estratégicas, a través de las cuales busca entregarle al país policías más humanos, íntegros, disciplinados, innovadores y efectivos en su gestión; policías más cercanos al ciudadano.

El proceso contribuyó de manera efectiva a que en 2017 fuera el año más tranquilo de los últimos 40 años en Colombia, con una disminución histórica en casi todos los delitos, como homicidio, lesiones personales, extorsión, secuestro y hurto de vehículos, entre otros.

Lo primero que hicimos fue crear una instancia de ‘gobierno corporativo’ para tomar de manera colegiada las grandes decisiones institucionales, denominada Cumbre de Generales. A la par desarrollamos una nueva Política Integral de Transparencia Policial, para garantizar policías ejemplares y rendir cuentas a la ciudadanía, reforzando los mecanismos de veeduría y el diálogo multisectorial.

Además, implementamos un nuevo protocolo de incorporación, para seleccionar a los mejores aspirantes, y pusimos en marcha una ambiciosa reforma educativa que renovará los currículos de educación policial. Y también estamos optimizando el bienestar de nuestros policías, como incentivo para que cada día se sientan más orgullosos de pertenecer a una institución con 126 años de historia.

Con la casa en orden, nos dimos a la tarea de acercarnos aun más al ciudadano. Lo comenzamos a hacer fortaleciendo el servicio de policía en las calles y vecindarios, tal como lo venimos haciendo a través del exitoso Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes, que ya cuenta con 4.854 en todo el país, el cual se ha fortalecido con la adquisición de más capacidades tecnológicas, con proyectos pilotos de interconexión de cámaras y circuitos de vigilancia privados, y la renovación de conectividad digital. A eso se suma la entrada en vigencia de un Nuevo Código Nacional de Policía y Convivencia, que, con su carácter preventivo, viene contrarrestando esos comportamientos contrarios a la convivencia y consolidando la cultura ciudadana.

Otro de los propósitos centrales del proceso MTI es el fortalecimiento de la seguridad en los campos. Con tal fin, más de 10.000 carabineros hacen parte del Sistema Integrado de Seguridad Rural (Siser), que cuenta con 2.000 policías técnicos agropecuarios que asesoran a nuestros campesinos en proyectos productivos.

Otros 100, pertenecientes al naciente Programa Nacional de Mediación Policial, contribuyen a fortalecer la convivencia en zonas de consolidación y estabilización. A otro grupo de carabineros lo capacitamos como guardabosques, para contribuir a proteger parques arqueológicos, zonas ecoturísticas y reservas naturales. También creamos los Cuadrantes Turísticos, como respuesta al vertiginoso crecimiento de este importante sector de nuestra economía.

Y para arreciar la lucha contra las distintas manifestaciones del crimen organizado fortalecimos nuestros servicios de inteligencia e investigación criminal, incentivamos la denuncia virtual mediante una aplicación y creamos un Cuerpo Élite para desmantelar organizaciones criminales que vienen atentando contra defensores de derechos humanos y líderes sociales.

A todo lo anterior, y para ser más efectivos en la lucha contra el crimen transnacional, el proceso MTI prevé seguir fortaleciendo la cooperación internacional, a través de la Organización de Policía Internacional (Interpol), la Oficina Europea de Policía (Europol), la Comunidad de Policías de América (Ameripol) y la Comunidad Latinoamericana y del Caribe de Inteligencia Policial (Clacip).

En conclusión, el proceso de Modernización y Transformación Institucional de la Policía Nacional, con visión 2030, está pensado para responder a las exigencias de una sociedad cada vez más globalizada, pero que al mismo tiempo reclama mayor atención en su ámbito local. Es un proceso para que policía y ciudadano actúen como un verdadero binomio, con el fin último de vivir en una Colombia segura y en paz.

GENERAL JORGE HERNANDO NIETO ROJAS
DIRECTOR DE LA POLICÍA NACIONAL