La semana pasada en ‘Anatomía de Grey‘ fuimos testigos de cómo Jackson planificaba una fiesta en honor a su madre, pero el evento terminaba de forma abrupta por un inesperado incendio. También conocimos al padre de Andrew DeLuca, que se presentaba junto a Karina en Seattle con un asunto entre las manos del que nada conocemos hasta ahora. Sin embargo, lo más interesante fue ver cómo Hunt estallaba al descubrir que Teddy y Koracick están juntos y felices, provocando, a su vez, que Amelia decidiera poner punto final a su relación. No obstante, la llegada de Leo volvía a poner todo patas arriba, dejándonos la duda de si podrán resolver sus problemas para formar una familia junto al pequeño o si, por el contrario, su historia ya no tiene más páginas por escribir.
En este decimosexto episodio de la decimoquinta temporada de ‘Anatomía de Grey’, titulado «Blood and Water», sin darse cuenta, Maggie revela a la prensa la verdad sobre sus orígenes, exponiendo el pasado y la vida sentimental de su madre y de Richard Webber. Por su parte, Amelia y Hunt comienzan los trámites de la adopción de Leo, un papeleo que se complica debido a su actual relación. Mientras tanto, el doctor DeLuca, el padre de Andrew y Carina, se presenta en el hospital con la intención de que compren y acepten desarrollar una investigación que supondrá toda una revolución en la medicina.
Secretos que merecen ser contados
Meredith y Karev en ‘Anatomía de Grey’
El pasado es algo que no se puede eludir por mucho que intentemos evitarlo. En la vida de Meredith han influido muchas personas que hoy en día ya no están presentes, pero que siguen teniendo un papel importante en su día a día, como es el caso de Ellis Grey, su madre. Hacía tiempo que no veíamos a la aclamada cirujana y en este episodio ha regresado, a través de un sueño, para ayudar a su hija en una investigación pero, sobre todo, para que no olvide jamás cuáles son sus raíces y de donde viene, unos lazos sanguíneos que nunca podrá cortar y que le han hecho ser la persona que es en la actualidad.
Quien no tiene tan claro su pasado es Maggie Pierce. La hija biológica de Ellis y Richard no suele mencionar la relación adúltera que tuvieron tiempo atrás sus padres, por lo que nos ha extrañado que, de repente, soltase la información durante una entrevista, revelando su gran secreto. Ahora todos los compañeros del ámbito médico conocerán la verdad, algo que a Merdith no le importa, pero que enfada en rotundo a Richard. Engañar a tu esposa no es algo de lo que estar orgulloso, tal y como confiesa Webber, hiriendo los sentimientos de su hija. Aunque estuviese mal lo que hicieron, Maggie es parte de esa historia, es fruto de esa relación y, ante todo, una persona y una maravillosa cirujana que ha sabido ganarse un hueco en la vida de todos y no tiene que esconder sus orígenes.
Maggie no es la única que ha estado manteniendo un secreto, Schmidt todavía no le ha contado a su madre que tiene novio, pero el joven confiesa que no es por miedo a reconocer que está saliendo con un hombre, sino que tiene temor a que su madre le haga ver todos los peligros que supone mantener una pareja estable. Sin embargo, no se puede vivir con miedo, tal y como han demostrado dos padres y su hija, que no han tenido más remedio que superar el temor a conocer cuál de los dos es el padre biológico con tal de saber si la joven padece o no una enfermedad genética. Arriesgarse y salir de la zona de confort no es fácil, pero el resultado a veces puede ser gratificante.
Cuestión de padres y madres
Andrew DeLuca y su padre en ‘Anatomía de Grey’
La madre de Karev sigue en Seattle y la relación con su hijo y su nuera es maravillosa, hasta que la mujer consigue asustar a Jo regalándole ropa para bebé. Al contrario que Alex, Jo no tiene nada claro lo de ser madre, de hecho, piensa que los hijos solo te arruinan la vida. Dar un paso así tiene sus consecuencias, su lado bueno y su lado malo, pero no tiene que ser ninguna tragedia, lección que ha aprendido gracia a Jackson, que no le ha escondido que tener una hija es un cambio radical en tu forma de vida, pero también un motor para seguir adelante cada día.
Hablando de padres y madres, quien se presentó por sorpresa la pasada semana fue el progenitor de DeLuca. El hombre ha viajado hasta Seattle en busca de financiación y respaldo para desarrollar una nueva investigación que permitiría gestar bebés en bolsas. Si consiguiera sacar adelante el experimento sería toda una revolución, razón por la cual Andrew ha aceptado formar parte del equipo y comenzar a forjarse una reputación. Sin embargo, los problemas mentales de su padre provocan que ni Carina ni Meredith confíen en esa idea, surgiendo discrepancias. Al final Karev da el visto bueno al proyecto, un trabajo que, probablemente, tenga repercusión en las vidas de todos los que están envueltos en esta historia.
Quienes también se encuentran metidos de lleno en problemas por culpa de los hijos son Amelia y Hunt. La pareja ha aceptado adoptar formalmente al pequeño Leo, pero como han decidido romper la relación, el papeleo se complica. Entre ambos siempre han existido muchos rencores, algo que ha vuelto a salir a la luz cuando Owen le ha recriminado a Amelia que no sea capaz de querer y dejarse querer, responsabilizándola de la ruptura. Mencionar el tumor cerebral que tuvo Amelia ha sido un golpe bajo, motivo que ha llevado a Shepherd a ceder la custodia completa de Leo. Ahora sí que parece que esta relación no tiene solución, puesto que si Amelia diera un paso atrás sería tirar por tierra sus ideales, aunque en esta serie estamos acostumbrados a giros y cambios de opinión repentinos y cualquier cosa podría pasar.
