Recientemente se estrenó la quinta temporada de ‘Black Mirror‘, compuesta por tres capítulos con un mensaje más positivo al que nos tiene acostumbrados la serie de Charlie Brooker. El creador, además, ha admitido en una entrevista concedida a TheWrap que uno de esos episodios, más concretamente el titulado «Striking Vipers», estuvo fuertemente influenciado por el famoso musical «Grease«.
Anthony Mackie y Yahya Abdul-Mateen II en ‘Black Mirror’
«La idea era un ejercicio para promover el compañerismo en una oficina. Una empresa decide llevar a cabo ese ejercicio que introduce a cada miembro de la oficina en una simulación de realidad virtual, en la que tienen una tarea que acometer juntos y ese cometido era preparar un musical«, reconoce el creador de ‘Black Mirror’. Fue entonces cuando pensaron en «Grease» como ejemplo: «La clave es que las identidades están mezcladas y no se sabe quién es quién. Yo podría ser Olivia Newton-John y tú, John Travolta».
El equipo finalmente desechó la idea y puso el punto de mira en el videojuego noventero «Tekken», del que el propio Charlie Brooker era fan: «Mis vecinos debían pensar que había una especie de mazmorra sexual en mi apartamento, porque mi compañero de piso y yo estábamos las veinticuatro horas del día: ‘¡Oh, sí! ¡Oh, sí! !Oh, Dios! ¡Oh, sí!», a lo que añade lo siguiente: «Me pareció un dilema interesante, cuando son mayores y todo esto sucede y los géneros se alteran en el mundo del juego».
Como resultado, «Striking Vipers» gira en torno a los personajes de Danny y Karl, dos amigos que se reencuentran en un juego de realidad virtual con sus avatares y dan con una experiencia sexual única que no pueden experimentar en otro lugar ni con ninguna otra persona. Esto les lleva a replantearse su propia sexualidad, afectando a sus propias relaciones sentimentales.
Los límites del porno
La pornografía también fue una de las grandes influencias del capítulo, ya que el equipo de escritores discutió sobre cómo «cada vez es más sofisticado y personal», admite la productora ejecutiva Annabel Jones, presente junto a Charlie Brooke en la entrevista. Así, todos empezaron a preguntarse, al igual que el personaje de Danny en el capítulo, «cuándo la pornografía deja de ser una distracción saludable y se convierte en una aventura sentimental».
