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¿Cómo vender un proyecto? Descubre cómo presentar un pitching y pasar de autor a gestor

La séptima edición del Festival de MiM series acogía en su programa una novedad: una serie de jornadas para poner sobre la mesa los quehaceres, entresijos y dificultades del proceso de creación de ficción para la pequeña pantalla. En su segunda jornada, celebrada este 11 de diciembre, tenía lugar la charla «La nueva figura del pitching: El autor como gestor y protagonista«, la cual tenía como protagonista a Marian Sánchez Carniglia, productora y coach que acumula en su curriculum trabajos con Ron Howard, Cameron Crowe, los hermanos Coen y James Cameron, entre otros.

Marian Sánchez Carniglia, en el Festival MiM Series 2019

Marian Sánchez Carniglia, en el Festival MiM Series 2019

Para los ajenos al mundo de lo audiovisual, un pitching es la primera presentación de un proyecto para intentar venderlo a una productora o a unos inversores que apuestes por él. El primer consejo que aporta Sánchez Carniglia es que no dejemos nada «en manos de terceros». Según ella, debemos tomar las riendas de lo que queramos hacer, porque, si lo delegamos en otros miembros de la industria, empezarán a condicionarnos y perderemos las riendas de lo que queremos hacer. Es por ello que recomienda ser gestor y protagonista.

Punto a punto

La transición de autor a gestor se hace siguiendo tres pautas, según la experta:

1. Conoce tu contexto: Investiga qué tipo de productor, autor o director quieres ser. Qué tipo de proyecto quieres escribir.

2. Conoce tus historias: Hay que saber quién va a ver la historia. De esta manera, sabrás qué elementos puedes incluir.

3. Conocerte a uno mismo: Qué es lo que más te gusta y dónde quieres llegar.

Con estos consejos, estaríamos preparados para enfrentarnos al famoso pitching. Aquí, Sánchez Carniglia detalla un aspecto interesante, y es que, muchas veces, no importa tanto la calidad del proyecto, sino la calidad de nuestra presentación. «Hay que tratar de conmover al interlocutor (la persona en representación de la cadena o plataforma) y al productor. «Si no se quedará en la nada», sentencia.