Demir y Ugur se escondieron en casa de uno de los hombres a los que traicionaron en el robo de los diamantes pero se dieron cuenta de que alguien había dentro de la casa y decidieron esconderse en un hotel. Demir está convencido de que Cemal les sigue la pista de cerca.
Demir ha hablado con Öykü y sabe que necesita sus medicinas, para comprarlas debe volver a su casa a por dinero aun sabiendo que alguien podría estar rondando o vigilando de cerca, alguien como Cemal.
Una vez dentro, Demir trata de coger el dinero con sumo sigilo cuando se da de bruces con Cemal que le espera, pistola en mano.
Tras un duro forcejeo, Demir consigue hacerse con el arma y, cargado de ira, apunta directamente a Cemal.
