Raúl no encuentra consuelo a la muerte repentina de su padre. Devastado, el hijo de Germán ahoga su dolor en alcohol.
Fran encuentra a su primo en el King’s y se acerca a él para mantener una conversación cómplice, pero Raúl está muy herido: “Tengo celos de que mi padre pasase sus últimas horas contigo” García le confiesa Mendieta que se le han quedado muchas cosas por decir a su padre, algo que jamás se perdonará. Y es que Raúl había discutido los últimos días con su padre por haber dejado la dirección de Garlo en manos de Fran. Desesperado, Raúl le hacía una propuesta a su padre que jamás ya tendrá respuesta.
Ahogado en el dolor, Raúl revive con Fran una anécdota que vivieron juntos en el pasado, cuando estaban unidos y eran como hermanos: la historia de Bruno, un cachorro que les dio una gran lección.
Tras recordar momentos inolvidables que vivieron juntos, Fran trata de hacer ver a su primo que deben sacar el lado bueno de esta situación tan dolorosa: “Su muerte ha servido para que luchemos por la empresa que fundaron nuestros padres”
La propuesta de Fran anima a Raúl. ¡En Garlo está a punto de cambiarlo todo!
