Karmele Marchante ha vuelto a ser foco mediático con la publicación de su libro «Puta no se hace», resultado de dos años de documentación entrevistando a prostitutas de Madrid y Nigeria y visitando los campos de refugiados de Calais, con el fin de derribar prejuicios. Con motivo de este lanzamiento, la catalana ha recordado algunas de sus experiencias del pasado, entre las que figura su época de colaboradora en ‘Sálvame’.
Karmele Marchante, antigua colaboradora de ‘Sálvame’
«He perdido la cuenta de las veces que me han llamado puta. Es un adjetivo que nos aplican demasiadas veces en la vida a las mujeres», reconoció Karmele en una entrevista publicada por El Español. «Me lo han llamado en el metro, en Facebook o, sin ir más lejos, en mi último trabajo en televisión, en ‘Sálvame’. Allí me llamaban puta, zorra, asquerosa, y lo hacían todos los días delante de la dirección sin que nadie hiciera nada. Hay grabaciones de ello«, prosiguió la periodista.
«En los programas en los que he trabajado por error, la televisión es la muerte. Como decía antes, todo es acoso, bullying, maltrato, vejación o no ser escuchada y ser ridiculizada por ser mujer y feminista», declaró Marchante, que reconoció que aguanta «por dinero», dado que su exmarido la había dejado arruinada. «Llegó un momento en el que ni por dinero se podía anguantar lo que tuve que aguantar. Por eso me fui», reconoció la excolaboradora.
«Auténticos cenutrios»
«Esa televisión es la televisión que tiene una cúpula machista, alquiladora de vientres y explotadora en cuyos platós solo se sirve a los hombres aunque fueran auténticos cenutrios», declaró Karmele, tajante, que añadió que ni tenía amigos «en los platós», «ni los quería». «Los despreciaba porque todos ellos son seres despreciables. Sin embargo, en la redacción soy amiga de todo el mundo. Yo soy mujer de redacción, de estar con gente normal», concluyó la periodista.
Violación, prostitución y pornografía
En la entrevista, Karmele habló del intento de violación que sufrió a los veinte años, y que en su momento no se había atrevido a compartir con nadie hasta años después, un paso que la hizo sentirse «acompañada». Además, la excolaboradora de ‘Sálvame’ tampoco ha dudado en criticar con dureza la pornografía y «la España putera», a la que calificó de «ignorante, paleta, cobarde», tras todos estos meses de su experiencia durante estos meses en el mundo de la prostitución.
