Las historias de los talents que participan en ‘La Voz‘ siempre tienen algo especial. Es a través de ellas con las que estos consiguen conectar con los espectadores en una primera instancia, para luego hacerlo a través de la música. La quinta entrega de las Audiciones a Ciegas estuvo llena de emociones y es que la noche daba comienzo con Andrés Martín, un joven de 22 años que había sido víctima del bullying, una historia que conmovió a la presentadora Eva González.
Eva González, presentadora de ‘La Voz’, se emociona con la historia de un talent
«Siendo pequeño fue bastante difícil la crueldad de los niños, los comentarios. Te va generando una depresión«, confesaba el talent, que encontró en su familia y en la música el mayor apoyo. «Encontrar la música, es un tópico decirlo, pero a mí me salvó«, añadía en su vídeo de presentación. Solo quedaba defender sobre el escenario su canción para demostrar que había llegado por fin su momento de brillar.
«Después de tanto camino y tan duro, esto es como mi recompensa«, expresaba Andrés, nervioso por enfrentarse a los sillones de los coaches. Sin embargo, todo salió a pedir de boca y Antonio Orozco y Pablo López, ajenos a la historia del participante, pulsaron el botón al mismo tiempo, dejando en manos del joven artista su destino en el concurso.
Sentimientos a flor de piel
El programa regaló a los espectadores un emocionante momento cuando este descubrió que estaba dentro del concurso, con una Eva González que, entre bambalinas, también era incapaz de contener las lágrimas. Andrés no solo acababa de superar un obstáculo más, sino que acababa de recibir la mayor recompensa, entrar a formar parte del equipo del malagueño Pablo López y tener así la oportunidad de cumplir su sueño en la música.
