Mateo ha acudido a ‘First Dates‘ para encontrar una pareja con la que comparta los numerosos gustos y aficiones que posee, todos ellos en una línea muy «tradicional». «Su idea es pasárselo bien, el karaoke, comer y el fútbol«, hacía un certero resumen a cámara su pareja en la cita. Sin embargo, pocos imaginaban que estas formas de ocio fuesen algo tan central en la vida de Mateo.
Mateo y Rosa cenan en el restaurante de ‘Fist Dates’
Mateo comenzaba intentando encontrar puntos en común con Rosa a través de la música. «Otra cosa que me gusta mucho son los karaokes», sorprendía a su cita que, por el contrario, admitía no saber cantar en absoluto. En este momento, Mateo veía la oportunidad para enumerar a sus cantantes favoritos: «Manolo Escobar, Junco, Chiquetete… Yo he llorando con la muerte de Manolo Escobar y de Antonio Molina. Me encanta, es que me encanta. Y es lo que hay», sentenciaba el amante de la canción española.
Al ver que no coincidían en el terreno musical, Rosa intentaba ver si tenían más suerte en el fútbol, pero imposible: él del Real Madrid y ella del Barcelona. Además, Mateo se confesaba fumador y esto es algo que molesta sobremanera a Rosa. Al conocer la opinión de su cita sobre sus gustos, Mateo reflexionaba: «Me quitas el futbol, me quitas los toros y me quitas el tabaco, no soy persona«.
La decisión final
Ante este panorama de incompatibilidad total, no sorprendió a los espectadores que Mateo decidiese considerar a Rosa «como amiga, pero como pareja no». Era obvio que «no ha habido esa chispa ni ese feeling«. Y por fin se hacía el milagro y los dos encontraban en punto en común: Rosa también pensaba que «como pareja está claro que no, no tenemos nada en común».
