Morgane limpiaba la comisaria de noche cuando unos papeles, que contenían el caso de la investigación del asesinato de Antoine Levasseur, cayeron al suelo. Morgane trataba de ordenar los papeles cuando algo llamó su atención. En cuestión de segundos, Alvaro se dio cuenta de que la dirección de la investigación era totalmente errónea.
Alvaro no puede dejar un enigma o un problema sin resolver, es superior a sus fuerzas. Con lo que tuvo que anotar en la pizarra de la investigación que la sospechosa era realmente la víctima.
Adam y Céline no daban crédito a l inteligencia de una ‘simple’ asistenta. Adam era más escéptico pero Céline se quedaba asombrada al descubrir su coeficiente intelectual.
Hazan obligaba a Adam a trabajar mano a mano con Alvaro. La mujer ,que vive sobrepasada entre el trabajo y sus tres hijos, no pierde detalle de todo lo que rodea al caso de la muerte de Antoine Levasseur y la desaparición de su mujer, Jeanne.
Cuando está convencida de que ha reunido todas las pistas, Alvaro y Adam vuelven a la escena del crimen para resolverlo: ¡Todo ha sido un crimen pasional!
