Inicio Comunicación Pedro Sánchez, sus meteduras de pata más gordas en Twitter

Pedro Sánchez, sus meteduras de pata más gordas en Twitter

El affaire entre Pedro Sánchez y las redes sociales no va viento en popa como él esperaba. Ni mucho menos. Es poner un tuit y lloverle los zascas. Pero es que lo pone muy fácil. Más allá de sus «posados robados», lo del presidente del Gobierno en Twitter es digno de mención. Vale que te equivoques una vez, dos o incluso tres, pero la lista de Sánchez es larga… Muy larga. ¿No se lo creen? Pasen y vean.

El pasado 29 de octubre, el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, recordaba emocionado que hacía más de dos décadas que había ido al espacio como tripulante del Discovery representando a su país. Pero el otro Pedro, Sánchez, estaba más orgulloso aún y quiso demostrarlo, a su manera.

Bonito mensaje de no ser por un pequeño detalle: Duque no fue el primer español en ir al espacio, no. El primer astronauta español en llegar al espacio fue Miguel López-Alegría. Muchos pensarán que se dejó llevar por el entusiasmo y no le dio tiempo a mirar la Wikipedia. Puede ser.

Tampoco le dio tiempo a mirar bien el día que decidió hacer un homenaje a las 13 rosas, el nombre con el que se conoce a las jóvenes fusiladas el 5 de agosto de 1939. El presidente puso bien todos los nombres, pero…

Efectivamente, el jefe del Ejecutivo quiso tener un gesto bonito y la volvió a liar al poner una foto de las actrices de la película. Sobra decir que los tuiteros no tardaron en comunicarle amablemente su error.

Y es que las fotos, una vez más, no son lo suyo. El pasado 23 de agosto felicitaba a la selección femenina de fútbol sub-20 por su pase a la final del Mundial de Japón. ¿Y qué hizo Sánchez? Pues colocar una imagen de la selección absoluta. Total, nadie se iba a dar cuenta, ¿o sí?

A su favor hay que decir que tan solo un tuitero parece darse cuenta del error. No ocurrió así con el lío que montó con las banderas. Corría el 17 de agosto y el jefe del Ejecutivo quiso poner su granito de arena con motivo del primer aniversario de los atentados de Barcelona. Sánchez lanzaba a las redes un mismo tuit en castellano y catalán. Hasta aquí todo en orden de no ser por que el tuit escrito en castellano iba acompañado de una foto con una bandera de España y el escudo del país y el traducido al catalán omitía tanto la bandera como el escudo.

Vale que Sánchez borró el segundo tuit e intentó arreglarlo pero los internautas son muy rápidos en esto de capturar imágenes y no le dieron tregua.

Y para terminar este capítulo de equívocos nos desplazamos a Soria, donde, según el presidente del Gobierno, nació el poeta sevillano Antonio Machado.

Ya estaba liada, por mucho que Sánchez intentase explicar que se trataba de una referencia a los años del escritor como profesor. Twitter no perdona y menos si tardas una hora en aclararlo.

Y ahora, el Pedro Sánchez ¿surrealista?

Hasta aquí el «Pedro Sánchez presidente», que diría la gran Carmen Calvo. Porque el «Pedro Sánchez persona humana» destacaba por sus tuits ¿surrealistas?

Bueno de este último mejor no hablamos que nos dan las mil. Terminaremos con una de las obsesiones de Sánchez: Donald Trump. El mismo al que le dijo vía Twitter que «la manera más segura de ganar guerras es no comenzar ninguna».

Le odia, le quiere, le vuelve a odiar… En realidad es más sencillo: si no hay foto (odio), si hay foto (amor). Y para muestra, un tuit.