“Todo el mundo os miente”, les dice Sirin a Nisan y a Doruk al hablar sobre Arif. Los niños están felices por haber vuelto a verle. Sin embargo, ella quiere hacer que pasen a odiarle como ella lo hace al considerarle el culpable de las muertes de Hatice y de Sarp.
Sirin les cuenta a sus sobrinos que Arif no ha estado en su pueblo, sino en la cárcel. Y les asegura que es un asesino: “Mató a vuestra abuela y también a vuestro padre”, afirmando que no fue un accidente.
Los niños quedan traumatizados ante el secreto, que Sirin consigue que quede entre los tres. Les hace prometer que no contarán a nadie que ella se lo ha revelado.
