Las persianas rústicas están pensadas para ambientes rurales, ya que dan un aire clásico y tradicional a nuestros exteriores. Tanto el diseño como la elección del material para fabricarlas influyen mucho en una de las tendencias del mercado y la industria 2.0: ser sostenibles.
Qué caracteriza a una persiana rustica sostenible
Lo ideal a la hora de colocar una persiana rústica es que esta sintonice con el entorno. Por eso, los lugares más adecuados son casas de estilo bohemio o que estén situadas en un medio rural. Ten en cuenta que va a ser un elemento de decoración exterior donde se van a fijar todas las miradas. Por supuesto que también cumple una importante función de aislamiento.
Con respecto al interior de la casa, esta sintonía no tiene que ser tan estricta, ya que podemos jugar e introducir detalles o decoración más clásica o industrial. Llegados a este punto, ¿qué caracteriza a una persiana rústica?
El material
Al igual que en el caso del diseño, el material con el que se fabrique nuestras persianas rústicas sostenibles va a potenciar más ese aire de pueblo que queremos conseguir. Aquí, las persianas de madera ganan por goleada, no solamente porque imitan la persiana clásica y tradicional del medio rural, sino porque no utilizan materiales artificiales en su composición.
Otra opción más barata y asequible es el uso de PVC reciclado, normalmente se usa para el modelo alicantino de persianas. Consiste en un diseño de lamas, de diferente grosor, que también puede ser fabricado en madera y que baja y sube a través de un sistema de poleas. Una de sus grandes ventajas es que tiene una instalación muy sencilla, no necesitas grandes ni complicados mecanismos ni complejas estructuras para hacerla funcionar.
El diseño
Las persianas «de toda la vida» ha de evocarnos a lo tradicional y al pasado. Por tanto, no todos los diseños sirven. El más habitual, que encajará perfectamente con una vivienda de estas características,, es la persiana de lamas. Su origen está en la localidad de Sax (Alicante). Se remonta a la fabricación con sarmientos de vid, aunque hoy no lo encontramos con este material.
Con respecto a diseño y funcionamiento, este tipo de persiana estaba pensado para reducir la entrada de luz en las casas, en verano, sobre todo en los momentos centrales del día. Pero no llegaban a bloquear todo el aire, sino que permitía que entrara algo de frescor por las ranuras; a veces, también algunos rayos de sol. Hoy en día, su cometido es el mismo, es un sistema aislante natural y de protección del interior.
Coste y mantenimiento
En general, el mercado de las persianas ha ido evolucionando y ahora te puedes encontrar nuevos materiales y mecanismos, como los eléctricos. En el caso de las rústicas, al estar pensadas para un entorno tradicional, no vas a encontrar el sistema automático. Como ventaja a este extremo es que los costes son mucho menores, incluso haciéndolas a medida.
Tampoco necesitan mucho mantenimiento, basta con quitarles el polvo, de vez en cuando, con un paño húmedo. El único problema es que si las lamas son de madera, pueden verse afectadas con el paso del tiempo y con el clima, si tu casa está en lugares muy húmedos o calurosos.
Para estos casos, no está de más pasarle con un poco de barniz, una vez al año. Así, las lamas lucirán como nuevas y se protegerá más a la madera. De cualquier manera, se trata de persianas bastante resistentes y duraderas.
Las persianas rústicas de esterillas
Una alternativa a las persianas de lamas son las denominadas «esterillas«. Con un funcionamiento similar, estas persianas se enrollan sobre sí mismas con un sistema de poleas. La diferencia es que no se hacen de madera, sino de PVC con finos listoncillos. Este diseño reduce algo ese carácter rústico que tienen las venecianas, estando las esterillas muy cerca de ser y funcionar como una cortina.
Sin embargo, este diseño encaja muy bien en un ambiente rústico, ya que recuerda bastante a los sarmientos de las ventanas rurales antiguas. Además, son muy ligeras y tienen una apariencia delicada e informal, siendo especialmente útiles para condiciones climatológicas extremas.
A diferencia de otros modelos, las esterillas las podemos fabricar con diferentes diseños, desde los más simples a otros geométricos. Además, las varillas pueden ser personalizadas en diferentes colores o tonalidades.
En definitiva, en el mercado de las persianas rústicas también se han introducido tendencias como la sostenibilidad. Así, utilizar materiales como la madera o el plástico reciclado están en sintonía con una fabricación más respetuosa con el medio ambiente. Con respecto a su diseño, este tipo de persiana mantiene la forma y la funcionalidad clásica, que nos recuerda a las casas de pueblo. Su utilidad, además de la estética, está relacionada con el aislamiento interior.
