Inicio Cosas que pasan Botsuana levanta la prohibición de cazar elefantes para contentar a agricultores y...

Botsuana levanta la prohibición de cazar elefantes para contentar a agricultores y safaris

En el país que más ejemplares de esos animales alberga del mundo, regía hace cuatro años un veto a la actividad. Organizaciones ambientalistas y personalidades cuestionaron la decisión.

El gobierno de Bostsuana ha dejado sin efecto la prohibición de caza de elefantes en vigor en todo el país desde 2014. Así, a partir de esta semana vuelve a estar permitido —aunque sea de forma controlada— disparar en este territorio africano contra los animales terrestres más grandes que habitan actualmente en la Tierra.

La polémica decisión entra en vigor después de que una comisión técnica nombrada por el mismo gobierno aconsejara el pasado mes de febrero emitiera un informe en este sentido. Los argumentos principales a favor de la caza de elefantes son la supuesta superpoblación de estos animales en diversas zonas del país, los daños que provocan algunos ejemplares en las tierras de cultivo cuando la sequía los empuja hacia allí  y los beneficios económicos que pueden conseguirse con la explotación de la caza en safaris de lujo.

El gobierno de Botsuana también alega que la restricción de la caza, instaurada por el anterior presidente del país, Ian Khama (2008-2018), ha tenido un «impacto negativo» en la forma de vida de muchas comunidades que antes se beneficiaban de ella.

Una manada de elefantes en el área de Mababeen Botsuana, el 19 de septiembre de 2018. Crédito: SIPHIWE SIBEKO/REUTERS.

«Era una suspensi, no una prohibición de la caza; no estaba destinada a ser permanente. Era para observar lo que pasaba en nuestro ecosistema», explicó Kitso Mokaila, el ministro de Medioambiente, Conservación y Turismo.

Con más de 135.000 ejemplares, Botsuana tiene la mayor densidad de población de elefantes del mundo y es considerado un santuario para estos animales, escapando ligeramente a la caza furtiva y comercio de marfil que ya ha borrado a un tercio de los elefantes africanos en la pasada década.

No obstante, el año pasado la ONG Elefantes Sin Fronteras denunció que al menos 90 elefantes fueron asesinados en Botsuana por cazadores furtivos en el lapso de solo tres meses.

Especie amenazada

Por otra parte, el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF) no celebró la decisión de levantar la prohibición. «No podemos apoyar esta posición, sobre todo porque estamos hablando de cazar una especie sometida a una presión brutal y que está en peligro», indicó Luis Suárez, responsable del programa de especies de WWF España.

«El mensaje que se está transmitiendo es que se pueden cazar especies amenazadas», lamenta.

Suárez reconoce que el gobierno de Botsuana «ha hecho bien los deberes» porque ha logrado una buena conservación de la especie, pero opina que la solución a los problemas entre humanos y paquidermos no es matar a estos últimos. Garantizar que haya una buena conexión entre espacios naturales donde se puedan mover con libertad y proteger a las comunidades con medidas de prevención de daños son algunas de las alternativas que propone WWF.

Fuente: Live Science/El País.