Inicio Cosas que pasan Ciertos meteoritos podrían contener los restos de antigua tecnología alienígena

Ciertos meteoritos podrían contener los restos de antigua tecnología alienígena

La evidencia de civilizaciones extraterrestres tecnológicas podría haber llegado a nuestro planeta hace tiempo sin que lo hayamos advertido.

Entre 1957 y 1968, los científicos decidieron intentar crear nuevos minerales que pudieran actuar como conductores de electricidad muy efectivos. Así «inventaron» un par: heideíta y brezinaíta.

Después de unos años, los mismos minerales comenzaron a aparecer inesperadamente en fragmentos de meteoritos que habían aterrizado en la Tierra. Resultó que estos no eran materiales que tuvieran que inventarse, aunque la forma en que pudieron formarse fuera del laboratorio seguía siendo un misterio para los científicos.

Ahora, seis décadas después, un investigador venezolano está tratando de conectar los puntos entre los minerales que esos científicos fabricaron en los laboratorios y los mismos minerales que llegaron a la Tierra desde el espacio.

«Tal vez, solo tal vez, esos minerales superconductores que vinieron del espacio también sean artificiales», planteó en su hipótesis B.P. Embaid, físico de la Universidad Central de Venezuela.

Heideita. Nombrada así en honor al meteorista alemán Hermann Wilhelm Friedrich Heide (1891-1973).

Y si ese es el caso, los minerales podrían ser evidencia de tecnología extraterrestre —o «tecnofirmas» como les gusta decir a los científicos—. «Es importante tener la mente abierta e incluso ser provocativo para considerar la siguiente pregunta: ¿son estos minerales meteoríticos muestras de firmas tecnológicas extraterrestres?», escribió Embaid.

Es una propuesta controvertida y las implicaciones son enormemente atractivas. Los científicos que buscan tecnofirmas alienígenas pretenden obtener la confirmación de que no somos la única civilización tecnológica del universo y que, de hecho, ni siquiera estamos entre las más avanzadas. Pero incluso ellos no están convencidos por el estudio de Embaid. Hay muchas razones para creer que esos minerales exóticos no son necesariamente la evidencia de que no estamos solos.

«Soy muy escéptico de que estos minerales representen firmas tecnológicas», dijo Edward Schwieterman, astrobiólogo de la Universidad de California, Riverside, al ser consultado sobre la hipótesis del venezolano. «Es muy posible que la heideíta y la brezinaíta se produzcan naturalmente en algún lugar del espacio. Y en ese caso, no necesitaríamos a extraterrestres para explicar la presencia de minerales en un puñado de rocas espaciales».

Pero el punto más amplio de Embaid, que la evidencia de extraterrestres podría existir justo debajo de nuestras narices, para nada carece de mérito. Después de todo, tendría sentido que una civilización alienígena también creara estos minerales. La vida inteligente, ya sea en este planeta o en la mitad de la galaxia, trabaja con los mismos elementos naturales y las mismas leyes físicas.

El estudio detallando la hipótesis ha sido publicado en el repositorio de preimpresión arXiv.

Fuente: DB. Edición: MP.