Un cometa que tendrá su máxima aproximación a nuestro planeta la próxima semana, es ahora el más brillante de estos objetos en el firmamento nocturno y lo será por unos días más. Tiene un color verdoso y un aspecto fantasmal.
Se trata de un pequeño astro que tarda 5.4 años en recorrer su órbita alrededor del Sol y que fue descubierto el 17 de enero de 1948 por el astrónomo estadounidense Carl Alvar Wirtaten, de allí su nombre: 46P/Wirtanen. Se espera que para el 16 de diciembre de 2018 se acerque a la Tierra a una distancia de 11 millones de kilómetros, o 30 veces la distancia a la Luna.
Esta cercanía permitirá que sea avistado por telescopios convencionales y a ojo desnudo en zonas con poca o ninguna contaminación lumínica, sin embargo, no será tarea fácil.
«Incluso para aquellos que sean bendecidos con un cielo oscuro y estrellado, hallar el cometa será todo un desafío. Esto es porque este tipo de objeto es inusualmente extenso en tamaño angular y tiene una apariencia difusa, tal como si fuera un fantasma cósmico», advierte Joe Rao al sitio especializado Sky & Telescope. «Recuerden que no están buscando una estrella brillante y definida sino un objeto que esparce su luz en un área relativamente grande».
Fuente: CBS News.