Inicio Cosas que pasan Una startup rusa quiere poner anuncios en la órbita baja terrestre

Una startup rusa quiere poner anuncios en la órbita baja terrestre

Una noche preciosa patrocinada por… [Inserte logotipo]…

La publicidad en las grandes ciudades se halla muy extendida en estos días, contribuyendo gravemente a la contaminación lumínica, y ahora una startup rusa planea elevar el problema, presentando anuncios literalmente en los cielos.

El proyecto, llamado Orbital Display, utilizará varios satélites del tamaño de una caja de pañuelos, llamados CubeSats para lograr su objetivo. El plan es posicionarlos a unos 450 kilómetros de altura, donde mostrarán mensajes ya sea comerciales o para presentar anuncios gubernamentales ante una emergencia, por ejemplo.

Cada satélite tendrá una vela desplegable capaz de reflejar la luz solar para formar los pixeles del logotipo o anuncio. Y a pesar que esta dependencia del Sol los haría funcionales solo en el crepúsculo vespertino y matutino, ya han conseguido reacciones negativas de los astrónomos y otros defensores del cielo oscuro.

«Es una amenaza para la capacidad de hacer investigación astronómica desde el suelo. Cada uno de esos destellos de luz en el cielo es algo que puede interferir con nuestra capacidad para recolectar fotones de fuentes astronómicas», dijo el astrónomo John Barentine, miembro del Comité sobre Contaminación Lumínica, Interferencias de Radio y Desechos Espaciales de la Sociedad Astronómica Americana.

Así se ve el paso de un satélite mientras se atraviesa en el campo de visión del telescopio espacial Hubble.

Sin embargo, esto último no parece importarle mucho a Vladilen Sitnikov, CEO de StartRocket y la mente detrás de todo el proyecto: «Estamos regidos por marcas y eventos. El Super Bowl, Coca Cola, Brexit, los Juegos Olímpicos, Mercedes, FIFA, Supreme, el muro mexicano. La economía está en el sistema sanguíneo de la sociedad y el entretenimiento y la publicidad son su corazón», afirma.

«Viviremos en el espacio, la humanidad comenzará a llevar su cultura allí. Esto es inevitable», agrega.

Dada su altura, los satélites no empeorarían el problema de la basura espacial. Es más, tras un año de funcionamiento caerían y se quemarían en la atmósfera terrestre.

Sitnikov se acercó a SkolTech, un Instituto de Ciencia y Tecnología de Skolkovo, para reunir profesionales, y según dijo al portal Astronomy, el primer lanzamiento de prueba podría tener lugar este año, con una ejecución completa en 2021 (todo esto, si es que consiguen el dinero necesario).

Fuente: ScienceAlert.