El Príncipe Enrique y Meghan Markle se casarán el 19 de mayo según se ha anunciado desde Kensington Palace. Como se indicó previamente, contraerán matrimonio en la capilla de St. George en el castillo de Windsor, a unos 34 km de Londres. Fue el 27 de noviembre cuando Clarence House anunció que el Príncipe había pedido matrimonio a la estadounidense a principios de ese mes, después de recibir el visto bueno de sus padres.
Meghan confesó en su primera entrevista tras el anuncio emitida por la BBC: “Fue una gran sorpresa y fue muy dulce y natural y muy romántico. Se arrodilló”. “Solo estábamos los dos. Creí que debía pillarle por sorpresa”, añadió Enrique. Le pidió matrimonio con un anillo diseñado por él mismo y que contaba con dos diamantes de la colección de su difunta madre. “El hecho de que me enamorase de Meghan tan rápido fue la confirmación de que todas las estrellas estaban alineadas. Todo fue perfecto”, contó Enrique.
La pareja se casará en una capilla del siglo XIV, que desde 1863 ha albergado unas cuantas bodas reales como la que unió al Príncipe Carlos y Camilla Parker-Bowles. Se espera que el tercer hijo de los duques de Cambridge nazca en abril y por lo tanto su nacimiento no debería interferir en este acontecimiento.
En su primera aparición pública tras su compromiso, Meghan Markle demostró sus tablas y se mostró muy natural en su primer acercamiento a los ciudadanos británicos. Eso ha hecho que no sea necesario que siga unos cursos de protocolo como los que recibió su futura cuñada, aunque sí que está recibimiento asesoramiento para llevar a cabo su transición a miembro de la realeza. Estas navidades, y a pesar del protocolo, pasará las fiesta con la familia de su novio.
Vía | E! Online
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