Jorge Pérez y Rocío Flores se reencuentran meses después de ‘Supervivientes 2020’

Jorge Pérez se alzó con el título de ganador de ‘Supervivientes 2020’ el pasado 5 de junio de 2020. Pero el que fue Guardia Civil no solo ganó los 200.000 euros del premio, sino que también se llevó una experiencia única y a unos cuantos buenos amigos. Así lo ha ido demostrando cada vez que se reencontraba con cada uno de ellos una vez que estuvieron en España.

Y este pasado lunes 10 de agosto Jorge Pérez se reencontró con otro de sus grandes apoyos en la isla: Rocío Flores. La hija de Antonio David Flores, en compañía de su novio Manuel, viajaron hasta Palencia para pasar unos días con el exsuperviviente, su esposa y sus hijos, que se encuentran en el Convento de Mave, un paraje único en el norte de España. Fue allí donde el concursante se casó con su mujer, Alicia, diez años atrás, y donde se encuentran ahora celebrando su aniversario.

En compañía de sus parejas

Y la primera jornada de estas vacaciones fue lo de más divertida, a juzgar por lo que ambos han compartido en sus redes sociales. Comenzaron con una comida al aire libre y luego se divirtieron los cuatro juntos intentando salir de un laberinto. Posteriormente se fueron a conocer la zona como el Pantón de Aguilar o el Embalse de Aguilar de Campo. Unos parajes en los que además aprovecharon para tomarse fotos cada uno con su pareja.

Ya este mismo martes 12 de agosto, la jornada ha transcurrido en el propio convento donde Rocío Flores y Manuel pudieron conocer a los hijos de Jorge Pérez y divertirse mucho. De hecho, Martina ha estado jugando con la hija de Rocío Carrasco y ha estado maquillándola: «Mirad qué guapa me ha dejado», decía Rocío Flores en un vídeo en el que muestra el resultado final.

Durante estos días juntos los dos exsupervivientes seguramente han aprovechado mucho para recordar divertidas anécdotas de los meses que pasaron en Honduras. Y no solo eso, sino que se han atrevido incluso a revivir uno de los momentos más ansiados durante el concurso: cuando tenían una prueba de recompensa. Aprovechando el postre de la comida, Rocío Flores y Jorge Pérez bromearon sobre tener que comérselo sin poder utilizar las manos y en un tiempo de 30 segundos.