Cuando eres un royal segundón hay un momento en la vida en la que tienes que plantearte qué puedes hacer realmente. Puedes tomar el camino del Príncipe Harry o escoger el que ha tomado Carlos Felipe de Suecia, que apuesta por representar a la Corona y servir a su país, tanto de forma tradicional, como a su manera.
Alejandro y Gabriel de Suecia en el campoAunque Suecia no optó por el confinamiento, los Reyes de Suecia sí se confinaron. Por su parte, el resto de la Familia Real que vive en el país escandinavo redujo su agencia presencial y apostó mayoritariamente por el teletrabajo. Una vez ha pasado lo peor, o se al menos eso se espera, los Bernadotte han ido saliendo más, aunque en el caso de los Duques de Värmland, han emprendido una campaña de promoción del turismo nacional. Su acertada decisión es su forma de hacer las cosas, de representar a su manera.
Un viaje lleno de aventuras
Para empezar agosto de 2020, el Príncipe Carlos Felipe y la Princesa Sofia viajaron al Blå Jungfrun, isla situada en el estrecho de Kalmar en la que se encuentra un Parque Nacional. Se trata de un destino perfecto para disfrutar de unas vacaciones llenas de aventuras como las que han querido tener los Duques de Värmland y sus hijos, el Príncipe Alejandro y el Príncipe Gabriel.
«Aquí encontrarás de todo. Desde suaves acantilados, playas de guijarros, exuberantes bosques caducifolios, cuevas y una vista fantástica a 86 metros sobre el nivel del mar. Una verdadera aventura», comentaron Carlos Felipe de Suecia y Sofia Hellqvist en su cuenta de Instagram, donde mostraron una fotos de su aventura familiar.
En esta ocasión, los Värmland han sido un poco tímidos y en las imágenes en las que aparecen están de espaldas, quizás para no centrar la atención en ellas y sí hacerlo en el bonito lugar que quieren promocionar. Eso sí, los cuatro se lo pasaron muy bien y disfrutaron de este increíble lugar que merece una visita.
