Noelia López, mujer del fallecido José Antonio Reyes, perdió a un hermano por una enfermedad

Noelia López está viviendo uno de los momentos más angustiosos de su vida, y es que muerte de su marido, José Antonio Reyes, la ha llenado de tristeza. Lo cierto es que ha querido expresar cómo se siente a través de su cuenta de Instagram publicado un vídeo de su marido con sus dos hijas, Noelia y Triana: «Amor de mi vida, no puedo soportar este dolor. Qué solitas nos dejas. Te llevas mis ganas de vivir. Hoy tengo q despedirme de ti, pero no tengo fuerzas. Te diré un hasta pronto porque tú y yo estaremos eternamente juntos».

Pero sus palabras de dolor y cariño no terminan ahí, porque sigue diciendo: «Espérame mi vida, volveremos a ser una familia donde estés. Ese día llegabas de un largo viaje y llegaste con quienes te daban vida, esa vida que ayer se nos fue«. Mientras, seguía lidiando con la pérdida de su hermano, Tony, que falleció en 2015. Con tan solo 25 años murió a causa de una enfermedad cuando acababa de terminar sus estudios de Ingeniería de Caminos, carrera universitaria que ella también posee.

Son muchas las publicaciones que ha hecho en las redes sociales enseñando todo lo que echa de menos a su hermano, y las palabras más duras las dijo cuando sufrió el varapalo, diciendo: «Llegaste a mi vida para enseñarme lo q es amar incondicionalmente, descubrir el mundo contigo, aprender todo lo que sé. Gracias por ser el mejor hermano del mundo, por todo tu amor, por todos tus abrazos, por todos tus besos, por tus consejos, por nuestras risas juntos, por nuestros secretos. En ese momento el futbolista jugaba en el Sevilla y quiso rendir homenaje a su cuñado poniendo las manos en forma de T en el terreno de juego.

Seguía superándolo

También Noelia López decidió tatuarse la cara de Tony en su brazo izquierdo, tatuaje que lució en su boda con el futbolista en junio de 2016 en Utrera, Sevilla. Tanto echaba de menos a su hermano que puso una foto con él de perfil en su cuenta de Instagram, y junto a esa fotografía escribió: «Te espero cuando miremos al cielo de noche: Tú allá, yo aquí. Siempre estarás en mi corazón, hermano. Te quiero».