Pilar Rubio y Sergio Ramos son ya marido y mujer. La pareja atendió a la prensa de forma excelente y no se blindó para vender una exclusiva.
Pilar Rubio y Sergio Ramos son ya marido y mujer. La pareja atendió a la prensa de forma excelente y no se blindó para vender una exclusiva. Pilar lució un espectacular vestido que resaltaba su espléndida figura. Sus flores negras le daban una pincelada rockera a su atuendo.
Él lució un traje bastante clásico y un peinado que vamos a dejar ahí. Al menos se ocuparon de que todos los que estaban informando de su boda estuvieran siempre en perfecto estado. Sin embargo, la boda del año se limitó a lo que ahora os contamos.
Los famosos invitados internacionales se limitaron a David Beckham y a su mujer que tenía una cara de asco para enmarcar. El resto era gente del fútbol, algún torero y personajes como Pablo Motos que acudió en solitario enfundado en una camisa con unos cuellos que le llegaban a las cejas.
En lo que a la fiesta se refiere es cierto que se montó un parque de atracciones, pero ni AC/DC, ni Aerosmith, ni nada de nada. Es más, Sergio debe, según Telecinco, 40 millones de euros a Hacienda por lo que nadie se explica cómo se gasta unos 3 millones de euros en la boda de marras.
Al final esto ha sido como el cuento de que viene el lobo. Mucha pompa, mucho boato, mucho hablar, pero no ha dejado de ser una fiesta en un cortijo que les ha costado una pasta y que quizá no haya tenido el nivel que se esperaba.
Eso sí, a la pareja les deseamos la máxima felicidad posible en esta nueva etapa. Seguro que son tan felices como lo han sido hasta ahora. Enhorabuena.
Vía | Telecinco
