Aunque no se trata de algo que estemos acostumbradas a ver -porque desde hace años que se nos enseña que un cuerpo bien depilado es sinónimo de belleza- la verdad es que tener vello en los pezones no es nada extraño, de hecho es algo normal. Veamos por qué.
Aunque pueda ser motivo de tabú, es algo de lo más normal que no debe preocuparte y un aspecto de tu cuerpo con el que deberías reconciliarte.
Pero como sabemos que eso no es tan sencillo de decir como de hacer, pues es posible que esta característica te haya ocasionado algún complejo, a continuación abordamos el tema con todo lujo de detalles y explicaciones para que entiendas los motivos que pueden existir para que crezca vello en esa zona, y la forma más correcta de eliminarlo -si esa es tu decisión final- sin cometer ningún error que pueda ser peligroso o contraproducente.
El vello en esta zona es un síntoma saludable
A no ser que sufras hirsutismo, síndrome del ovario poliquístico, que estés embarazada o que estés padeciendo los efectos secundarios de algún medicamento (que son algunas de las condiciones que podrían provocar un aumento exagerado del crecimiento del vello en la zona de las mamas), tener vello en los pechos no debería preocuparte.
Solo deberías consultar a un médico si observas un absceso, que podría deberse a una infección de un folículo o de las glándulas sebáceas que tenemos en esta zona. Estén separados, juntos, sean discretos o tengan un color fuerte suelen ser una característica de lo más normal que podría deberse incluso a un desbalance hormonal donde los niveles de testosterona hayan subido.
Aun así, lo más normal es que los pelitos que aparecen en la parte de la aureola lo hagan gracias a las conocidas como ‘glándulas Mongomery’ -cuyo propósito es mantener la piel alrededor del pezón hidratada- que sueltan un material sebáceo que nos permitirá amamamantar cuando sea necesario ¡así que lo cierto es que el vello es señal de buena salud mamaria!
¿Cuál es la mejor forma de quitarlos?
Aun así, si de todas formas eliges deshacerte de ellos, olvídate de rasurarlos con una cuchilla porque podrías provocar que aparezcan más, hacerte un corte grave en una zona muy delicada o provocar una infección.
La mejor forma de eliminarlos es con unas tijeras pequeñas, -lo más cerca de la base que puedas y asegurándote de que no te lastimas- e incluso puedes hacerlo con unas pinzas o con cera si buscas una solución a corto plazo, pues si hablamos a largo plazo, lo más efectivo suele ser recurrir a la depilación con láser ¡aunque la mayoría de expertos coinciden en que si es algo que realmente no te molesta lo mejor es dejarlos donde están!
