Inicio Cuba “Cada elector, un observador”, la campaña contra el fraude en las urnas

“Cada elector, un observador”, la campaña contra el fraude en las urnas

(Foto Agencia Cubana de Noticias)

LA HABANA, Cuba. – ¿Qué pasaría si el NO ganara en Cuba? Para Juan Manuel Moreno Borrego, secretario ejecutivo de “Candidatos por el Cambio”, “esa es la madre de todas las preguntas”. Borrego es uno de los principales apoyo que ha encontrado la campaña “Cada elector, un observador”, creada y promovida por el periodista Frank Abel García y la coordinadora nacional de la Comisión Cubana de Defensoría Electoral (COCUDE), Zelandia Pérez.

“El primer objetivo es lograr movilidad ciudadana”, afirma Moreno Borrego, quien ya ha vivido otras experiencias en procesos electorales cubanos. “¿Y cómo lo logramos? Aprovechando el acceso de muchas personas a las redes sociales. Creamos un canal de YouTube, una página web, una página en Facebook y varios canales por WhatsApp donde distintas personas puedan empezar a interactuar y generar un flujo de información en varias direcciones”.

Según el activista, también existe una Twitter a través de la que se ha logrado “un rebote incluso entre personas que no son declaradamente opositores o disidentes, sino ciudadanos que están viendo la campaña”.

De igual forma, Frank Abel García puntualiza algunos detalles que son necesarios si se tiene en cuenta la poca experiencia que tiene la ciudadanía cubana en temas electorales. “Lo principal es evitar el fraude”, dijo el activista, consciente de que resulta un hecho difícil teniendo en cuanto de que se trata de un Estado acostumbrado a manipular cifras a su antojo y conveniencia.

Aun así, García insiste en que “hay que educar a las personas en la importancia del derecho electoral y a que hay que hacer la denuncia de cualquier cosa que suceda durante el proceso y no solo en el momento de la elección”.

La posición de la campaña por la observación electoral no es opuesta a ninguna de las campañas que promueve la sociedad civil cubana, pero Moreno Borrego asegura que surgió para “hacer validar el voto del “NO” porque sabemos que en un esquema totalmente cerrado -refiriéndose al sistema electoral cubano- donde la luz de la democracia es muy difícil que llegue, tiene que haber una observación masiva donde cada elector ejerza su derecho respaldados por la ley electoral en su artículo 4c y del 111 al 116”.

Para cumplir los objetivos de “Cada elector, un observador” se han implementado varias herramientas entre ellas un correo institucional ([email protected]) desde donde se puede solicitar información; o seguir la cuenta de Twitter @ACOE_Cuba, más la elaboración del “Manual del Procedimiento para el Observador”, donde, según explica Moreno Borrego, “se conceptualiza lo que es un observador, sus funciones, las requisitos para serlo y una breve historia de cómo incide la observación electoral en los procesos políticos en el mundo y cómo se reflejan en Cuba”.

Los organizadores de la campaña señalan que se ha elaborado una boleta de incidencias o planilla de observación que puede llenarse desde el móvil y ser enviada a un centro de compilación que está en el correo. De igual forma, pueden coger un teléfono público, o marcar con el 99. De ambas formas la información será recogida.

García anuncia que habrá dos líneas móviles y un teléfono fijo abierto durante todo el día 24 de febrero y espera concientizar a los votantes con el eslogan “tu 23 cambia tu 24”, que se lanzará todos los viernes en Twitter.

“La tiranía no hay que legitimarla”, dice Moreno Borrego. “Ahora, la acción ciudadana, además de un derecho, es lo único que puede legitimar el poder del ciudadano”, agregó el activista, quien también aseguró que las organizaciones están “mirando en una misma dirección”.

“Estamos haciendo un trabajo en paralelo entre COCUDE, Observadores de Derechos Electorales (ODE) y Ciudadanos Observadores de Procesos Electorales (COPE)”, asegura Zelandia Pérez.

“Somos tres organizaciones de observación electoral trabajando en conjunto, pero se nos han sumado otras como observadores voluntarios, ya sea el Partido Autónomo Pinero, algunos miembros de “Somos Más”, el Comité Ciudadanos por la Integración Racial, la Consultoría Jurídica Las Villas Ley, de Rolando Ferrer; la Fundación Logos, de Roberto Díaz Vázquez. O sea, que hay varias organizaciones de la MUAD que se han incorporado a la observación electoral”, resume la activista.

A Moreno Borrego le parece que “el régimen tiene la misma percepción de unidad que él y una señal es la campaña que ellos están desarrollando por el SI, porque les preocupa más el NO que el hecho de que la gente no vaya a votar”, analiza.

Pero “si el NO gana tienen que reformular la constitución”, “tendrían que crear una asamblea constituyente que imponga un documento nación por una orden ejecutiva presidencial, pero como Cuba es parlamentaria tendrían que disolver el parlamento”, dicen los activistas.

Para García, “tendrán que ser coherentes, porque eso aumentaría la presión. Creo que al final verían cómo darle la vuelta al NO o impondrían la constitución”, teoría esta última que es la que más se ajusta a la realidad cubana. “Nos estaríamos enfrentando a una primera elección en las que tienen una respuesta negativa”, afirma el periodista sobre la base supuesto caso de que el gobierno reconociera que la mayoría no quiere la nueva Constitución.