MIAMI, Estados Unidos. – Este 19 de julio fueron citadas por la policía política cubana Anay Remón García (Ana León), periodista de CubaNet; y Yanela Durán Noa, esposa del reportero independiente Augusto César San Martín. La primera supo de la citación a través de una llamada telefónica, luego de que el teniente Ernesto, de la Seguridad del Estado, le dejara el aviso con su mamá, apenas una hora y media antes de la “entrevista”, que tuvo lugar a las 10:00 am y por espacio de una hora en la unidad policial ubicada en Zanja, municipio de Centro Habana.
Durante el encuentro, la periodista fue amenazada con gritos y aspavientos por el Capitán Jorge, acérrimo represor de los colabores de CubaNet. La reportera aseguró a nuestro medio que más de la mitad de la entrevista estuvo dedicada a difamar a Augusto César San Martín, como método de presión-persuasión para que deje de trabajar con él. Asimismo, el esbirro le dejó claro que se avecinan peores agresiones contra ambos, y contra sus seres queridos, pues ninguno de los dos ha aceptado “abrir un canal de comunicación” con la policía política, eufemismo que emplean en sustitución del término “informante”.
Según trascendió en la entrevista, la Seguridad del Estado estaría preparando una causa penal contra Augusto César por delitos no especificados. El capitán Jorge le reiteró que tanto ella como el reportero tienen prohibición de salir del país, y así permanecerán hasta que ellos quieran. Al cierre de la entrevista con Jorge tomó la palabra una teniente que se presentó con el nombre de Elizabeth, y que en lo adelante será la encargada de “atenderlos”.
Yanela Durán Noa fue citada para las dos de la tarde y recibida por los mismos agentes. Según reveló a CubaNet su esposo, el capitán Jorge justificó la entrevista con el pretexto de que ella sería más “razonable” y le advirtió que si Augusto César continúa con su labor como periodista, sufrirá más represión.
La Seguridad del Estado prohibió salir del país a Yanela Durán el pasado 11 de julio, a pesar de no estar vinculada con la prensa independiente. Al conocer la sanción contra su esposa, Augusto César se negó a viajar solo y denunció el atropello en las páginas de CubaNet. El motivo del viaje era visitar a la familia del periodista, quien asegura que la medida, además de arbitraria, fue impuesta para perjudicarlo a él y ocasionarle angustia a su madre, residente en Estados Unidos.
Desde que se verificara el cambio de gobierno, la Seguridad del Estado ha recrudecido el acoso hacia la prensa independiente y el activismo civil en Cuba, desbordando el marco personal para dañar también a los familiares, particularmente las madres; y culpando a los periodistas por cualquier sufrimiento infligido a sus seres queridos. La sistematicidad y crueldad de tales agresiones han menguado el número de voces insurgentes, en una oleada que no cesará hasta desarticular los tres medios alternativos que hoy motivan la ira del régimen: CubaNet, Diario de Cuba y ADN Cuba.
