MIAMI, Estados Unidos.- Un grupo protector de animales hizo perturbadores hallazgos en Miami el pasado 6 de diciembre, al encontrar, al parecer como parte de rituales de santería, una cabra decapitada, una docena de pollos desmembrados, dos tortugas encadenadas con un candado, una foto de una pareja, velas y figuras de madera, publicó El Nuevo Herald.
Los animales fueron sacrificados en una zona pública conocida como Hobie Beach o “la playa de los perros”, ubicada en la entrada de Virginia Key, Florida, informó en su sitio de Internet Animal Recovery Mission (ARM).
En el lugar se hallaron cuatro sitios de sacrificios, y la ARM dijo además que el descubrimiento de tres cabras, una de ellas decapitada, de los pollos desmembrados, así como frutas, velas y artefactos que se colocaron alrededor de los cuerpos de los animales, al parecer estaba relacionado con la “fiesta de Shangó del 4 de diciembre, una de las deidades más temidas [de la santería]”.
“Según la tradición de la santería, Shangó es conocido por su apetito por las tortugas, cabras, ovejas, gallos y vino tinto. Todos estos artículos fueron encontrados en el lugar”, afirmó ARM en su publicación.
La semana anterior al citado descubrimiento, la ARM había encontrado varios sitios de sacrificio también, a poca distancia de la isla Hobie Beach.
Así mismo, el Herald también destacó que una persona que realizaba surf de remo en la Bahía de Miami encontró dos tortugas encadenadas con un candado. Cuando fueron rescatadas, tenían un envoltorio con una foto de una pareja y dos muñecas rojas. Las tortugas terrestres sufrieron severos daños al ser arrojadas al agua salada, así como por tener bajo peso, probablemente debido a las circunstancias y el estrés al que fueron sometidas.
La organización dijo que continúa investigando y exponiendo el alto número de casos de sacrificio de animales en sus esfuerzos por lograr un cambio constitucional en la Ley de Libertad de Religión, un esfuerzo de colaboración que se está realizando con el Fondo de Defensa Legal Animal.
“ARM mantiene su postura de que no está diciendo que practicar una religión en particular es ilegal, sino que está centrando su atención en los actos delictivos con los animales”, dijo ese grupo.
Antes de las ceremonias de sacrificio, comerciantes ilegales intercambian los animales, que son objeto de algunos de los tratos más violentos y despiadados, incluida la forma en que se manejan, procesan y transportan, detalló ARM.
El grupo ha investigado, expuesto y logrado que cierren casi 140 operaciones ilegales de sacrificio de animales.
