Inicio Deportes Natación sincronizada: ¿es sólo cosa de mujeres? – Notas de Fútbol

Natación sincronizada: ¿es sólo cosa de mujeres? – Notas de Fútbol

Todo el mundo sabe nadar, o casi todo el mundo. Se dice que es como ir en bicicleta, una destreza que una vez aprendida nunca se olvida. Sin embargo, más allá de nadar, hay un deporte que combina esta actividad con la gimnasia y la danza: la natación sincronizada. Esta disciplina, que se realiza (obviamente) en el agua, cuenta con la complejidad que supone ofrecer un bonito espectáculo en el agua. La coordinación de movimientos y la sincronización (nunca mejor dicho) con la pareja o el grupo que acompaña al nadador son dos aspectos característicos de este ejercicio físico. La coreografía acuática se ajusta, además, a un tiempo: al que marca la música. Por tanto, puede verse que es sumamente compleja. De ahí precisamente, su mérito.

No obstante, hasta hace bien poco la natación sincronizada se ha asociado únicamente con la mujer, de igual modo que el fútbol suele vincularse al hombre. Pues bien, una de las novedades en el mundo del deporte es que la presencia masculina se dispara en la natación sincronizada. Esto no significa que previamente a este año 2023 no existieran hombres en dicha disciplina. Claramente, los había, pero no contaban con una visibilidad a la altura de sus capacidades. Ahora sí es el momento en el que la sociedad toma conciencia de que el hombre ta

mbién ha sido discriminado en el deporte. En este caso, dicha desigualdad se ha producido en la natación sincronizada.

Afortunadamente, para el 2024 se prevee que pueda ser posible aplicar el codigo promocional 1xbet a las competiciones de natación sincronizada de los Juegos Olímpicos de 2024, los cuales tendrán lugar en París. La visibilidad que los hombres adquirirán hay que agradecerla, en parte, a la FINA: la Federanción Internacional de Natación, responsable de implementar todas aquellas modificaciones necesarias para que los nadadores masculinos puedan competir de cada vez en más pruebas.

¿Siempre han sido ellas las protagonistas?

Si echamos la vista hacia atrás, observaremos que en un principio -hasta el año 1941-, la natación sincronizada era una disciplina mixta, es decir, admitía tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, a partir de esta fecha se produjo un cisma: los hombres competían por un lado y las mujeres, por el otro. Con el tiempo, la categoría femenina adquirió mucha más fuerza que la masculina. Sin embargo, la presencia masculina aún permanecía relativamente vigente en el año 1952, cuando se disputaron los Juegos de Helsinki. De hecho, mujeres y hombres compitieron sin distinción de géneros. Por tanto, en los años 30 y 40 todavía era habitual la presencia masculina. Posteriormente, EE.UU creó la división en categorías, y hombres y mujeres pasaron a competir por separado.

¿Había malas intenciones?

Cuando la Unión Atlética Amateur estadounidense optó por esta separación en dos categorías distintas, lo hizo pensando en que los hombres tenían unas condiciones físicas que les favorecía (por propia biología) con respecto a las mujeres. Fue la propia sociedad la que, al generarse esta división, abogó más por observar la práctica que efectuaban las mujeres, antes que valorar la de los hombres. Llegó un momento en que se aceptó sólo la categoría femenina, a la hora de competir. Esto sucedió en los Juegos de los Ángeles de 1984. Según el comité deportivo, se hizo de este modo para dar preferencia a la mujer, cuya presencia en general, en el mundo del deporte, era inferior a la del hombre (por ejemplo: en piragüismo y atletismo).

¿Ya había hombres antes de los Juegos de 2024?

Los hombres llevan compitiendo en natación sincronizada a nivel mundial desde 2015. En dicho año, la FINA (anteriormente mencionada) permitió su incorporación en los mundiales de natación. Ahora, esta organización da un paso más y permite que también compitan en París, para el próximo año (2024). Pau Ribes es uno de los referentes españoles en la natación sincronizada. En 2022, junto a Emma García, logró la cuarta medalla para la delegación española en los Europeos de Roma.

¿Esta medida es suficiente?

Bueno, por el momento es aceptable. Todavía falta algo más de justicia para los hombres en la natación sincronizada. No obstante, es un logro importante que se haya conseguido restablecer (más o menos) la idea original con la que se inició esta disciplina: la participación conjunta en natación sincronizada de hombres y mujeres. La competición, de ahora en adelante, dejará de ser femenina exclusivamente (en lo que respecta a mundiales y Juegos Olímpicos), y pasará a integrar a dos hombres en cada equipo de ocho integrantes.

En cualquier caso, no hace falta necesariamente esperar hasta los JJ.OO para ver a los hombres competir,: las competiciones de Fukuoka en 2023 y las World Series suceden antes y ya cuentan con presencia masculina en algunos equipos.