Los 350 diputados elegidos en las pasadas elecciones del 28 de abril han vuelto hoy a la Carrera de San Jerónimo tras más de dos meses de parón de la actividad parlamentaria. La constitución de las Cámaras se ha desarrollado en un escenario atípico, condicionado por las elecciones locales, autonómicas y europeas del próximo domingo. Lo que no cambia es el “mantra” más repetido al inicio del curso político: nuestros representantes en las Cortes cobran mucho, un axioma certero si lo comparamos con el Salario Mínimo Interprofesional (SMI).
El sueldo de sus señorías se compone de tres partes: la institucional, la indemnización y los complementos, cuya suma alcanza 5.000 euros, es decir, cinco veces el SMI que se sitúa en 900 euros. Sin embargo, si lo comparamos con lo que perciben sus colegas europeos, los diputados españoles cobran menos que la media con «sólo» 10 países europeos por debajo de nuestro país, según una investigación de Euronews.
En líneas generales reciben una asignación institucional de 2.972,94 euros mes, cifra a la que hay que sumar los complementos en función del cargo que desempeñen y la indemnización para gastos que sean indispensables en el cumplimiento de su función. Este último concepto, no exento de polémica, se destina a cubrir los gastos que les origina la actividad de la Cámara –por ejemplo el alquiler de una vivienda o manutención–, y oscila entre los 1.921 euros para los diputados de circunscripciones distintas a Madrid y los 917,03 euros para los electos por la capital. Por lo tanto, si tomamos como referencia un diputado raso que represente a la ciudad de Cádiz en la Cámara Baja, su señoría cobra, como mínimo, 4.893 euros al mes.
El mencionado monto corresponde a la nómina básica de un parlamentario porque a partir de esa cifra, su salario no hace más que engordar en función de complementos, dietas y otros conceptos cuyas cantidades pueden fluctuar entre los 700 y 9.000 euros. Por ejemplo, la nueva presidenta del Congreso Meritxell Batet cobrará unos 14.500 euros mensuales en 14 pagas –203.000 euros brutos anuales–. Por el mero hecho de ser diputada recibirá 2.972,94 euros, asignación a la que se añade el complemento de miembro de mesa (3.242,65 euros), los gastos de representación (3.521,26) y los de libre disposición (2.887,13 euros). En total, más de 12.000 euros mensuales a los que se suma la cuantía de 1.921 euros, ya que en su caso es cabeza de lista por la circunscripción de Barcelona. Es, con diferencia, el representante del Congreso que más percibe. Los demás miembros de la Mesa, compuesta por el mencionado Presidente, cuatro Vicepresidentes y cuatro Secretarios, según recoge el Reglamento del Congreso, reciben los mismos complementos en cuantías más reducidas.
Los portavoces de grupo, además de su designación constitucional y su indemnización, cobran 1.840,72 euros en concepto de representación y 979 de libre disposición, cantidades de las que también disponen los portavoces adjuntos, pero en menor cantidad. Asimismo, los presidentes, vicepresidentes, secretarios, portavoces y portavoces adjuntos de las Comisiones perciben entre 1.500 y 735 euros en concepto de gastos de representación. En la anterior Legislatura, se constituyeron un total de 57 comisiones entre Permanentes, No Permanentes, de Investigación o Mixta.
Entre quienes reciben este salario están Jordi Sánchez, Oriol Junqueras, Jordi Turull, Josep Rull y Raúl Romeva, los políticos independentistas procesados por el referéndum ilegal del 1 de octubre que consiguieron escaño en las elecciones del 28 de abril. Los cuatro primeros en el Congreso y el último en el Senado. Los cinco salieron ayer de la madrileña cárcel de Soto del Real para recoger su acta y hoy han vuelto a las Cortes para continuar interpretando su particular «show» -con coste a las arcas públicas- en el que han prometido su cargo en base a la Constitución, esa misma que intentaron dilapidar.
Kit tecnológico
Sus señorías no solo reciben su nómina, también tienen dietas. Cuando se desplazan, si usan su coche, se les abona 0,25 euros por kilómetro, así como el pago de peajes. Aquellos diputados que no disponen de vehículo cuentan con tarjeta de servicio Taxi con un límite anual de 3.000 euros. Según datos de Europa Press, en la pasada Legislatura tan solo el 25% de los diputados renunció a su uso.
Por último, en el momento de recoger su acta, los diputados y senadores reciben lo que se conoce como el «kit tecnológico» compuesto por un iPad, un iPhone, una cartera y un despacho, que en caso de los presos políticos permanecerá vacío hasta que se resuelva su situación procesal.
Todo este gasto supone a las arcas del Estado un reembolso anual de 29 millones, según el presupuesto prorrogado del ejercicio de 2018, de los que 5,7 millones corresponden a los diferentes complementos y otros 8,5 a las indemnizaciones por residencia.
