El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha comparecido hoy en Ferraz para valorar la carta de la Generalitat al requerimiento del Gobierno, cuando expira el plazo para que vuelva a la legalidad. Los socialistas consideran que la misiva «no responde» a lo que se les exigía desde Moncloa y aunque si bien resulta poco clarificadora en este sentido, sí lo es en tres vertientes: en una propuesta de diálogo «tramposa» que solo busca hablar de desconexión, en la afirmación de que en España existe represión política y en la amenaza de votar la independencia si se aplica el 155. «La democracia y el Estado de Derecho no pueden ceder ante esta amenaza», ha dicho Ábalos, al tiempo que recordaba que Puigdemont será el único responsable de que se suspenda la autonomía.
En cualquier caso, el PSOE defiende que la intervención que se realice en Cataluña debe ser «lo más breve y limitada posible» con el horizonte de restablecer la normalidad democrática y hacer cumplir las obligaciones legales. Ábalos ha emplazado al Gobierno a «tomar la iniciativa» para recuperar el autogobierno en Cataluña y se ha remitido a la aprobación de las medidas concretas por el Consejo de Ministros el próximo sábado para explicitar la opinión de los socialistas al respecto. No obstante, en Ferraz consideran que el 155 es un artículo «perfectamente constitucional» que se debe utilizar con el objetivo de «restablecer el cumplimiento de la legalidad democrática e institucional». Ábalos también ha criticado la «oferta de diálogo tramposa» de la Generalitat, que sólo quiere hablar de desconexión y que rechaza participar en la Comisión del Estado Autonómico impulsada por el PSOE en el Congreso de los Diputados. «¿De qué clase de diálogo estamos hablando? El PSOE no negocia la independencia ni reconoce la bilateralidad del Estado con Cataluña», ha zanjado, advirtiendo de que los socialistas rechazan que en Cataluña o España exista ningún tipo de «represión política».
