Inicio Destacadas Hacienda extrema su control sobre Catalunya y otras 10 autonomías

Hacienda extrema su control sobre Catalunya y otras 10 autonomías

El Ministerio de Hacienda ha remitido cartas a once comunidades autónomas en las que ha detectado un riesgo de incumplimiento de la regla de gasto y a las que reclama datos sobre ajustes previstos –en unos casos- o medidas preventivas –en otros- que garanticen el cierre del 2017 dentro del objetivo marcado por el Ejecutivo. La regla de gasto para el 2017 establece que el presupuesto no puede crecer por encima del 2,1% respecto al ejercicio anterior, ni siquiera en el caso de que los mayores ingresos lo pudieran permitir.

Las misivas, firmadas por la secretaria general de Financiación Autonómica y Local, Belén Navarro, el pasado 5 de diciembre, están dirigidas a los interventores generales de Catalunya, Andalucía, Comunidad Valenciana, Baleares, Navarra, Castilla-La Mancha, Cantabria, Extremadura, Madrid, Murcia y Aragón.

En las cartasHacienda alerta de que del análisis de los datos de ejecución presupuestaria y del gasto computable a estas comunidades se ha apreciado una evolución que «podría poner en riesgo» el cumplimiento de la regla de gasto. Por ello, les reclama que informen de las causas de esa posible desviación así como de las medidas que la comunidad piensa poner en marcha para su corrección «antes del cierre del presente ejercicio».

Catalunya

En el caso concreto de la carta dirigida a la Interventora General de la Generalitat de Catalunya, Rosa Vidal, el Ministerio relata que, según los últimos datos publicado el pasado 28 de noviembre en la Central de Información Económico – Financiera de las Administraciones Públicas, el gasto computable a efectos del cálculo de la regla de gasto estaba creciendo el 3,2% en la comunidad, por encima de la tasa de referencia del 2,1%. En la misiva, no obstante, el Ministerio admite que del último informe mensual se desprende «un posible cumplimiento» de dicha regla de gasto.

Atendiendo a esta doble circunstancia, Hacienda reclama a la Interventora General que dé cuenta de «la causas determinantes de la desviación» acontecida y de «las medidas que tenga previsto adoptar la Comunidad para su corrección antes del cierre del presente ejercicio», en alusión a la posible necesidad de nuevos ajustes del gasto.

Queja de Andalucía

Una exigencia similar aparece en las cartas enviadas a otras seis comunidades (Andalucía, Aragón, Baleares, Murcia, Navarra y Valencia).  

La consejera andaluza de Hacienda, María Jesús Montero, ha puesto en duda los datos de Hacienda que atribuyen a la comunidad un aumento del gasto del 2,8% ya que –según ha dicho en rueda de prensa- no hay ninguna “transparencia sobre cómo se computa la regla de gasto”. Montero ha expresado su sospecha de que el Estado pueda estar imputando a las comunidades “una parte del gasto del Gobierno central que no nos corresponde”.

A comunidades como Castilla La Mancha, Cantabria, Extremadura o Madrid, con menores crecimientos presupuestarios, Hacienda no les reclama medidas de ajuste sino planes que les mantenga dentro de la senda iniciada

Medidas disciplinarias

En la mayor parte de las misivas se recuerda a las comunidades que el incumplimiento de la regla de gasto o de las exigencias de información daría lugar a la adopción de las «medidas coercitivas» previstas en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que pueden ir desde una mayor vigilancia sobre las cuentas –como ocurrió en el Ayuntamiento de Madrid- hasta la imposición de una multa de hasta el 0,2% del PIB local (una medida extrema aún sin estrenar).

Esta advertencia de mayor disciplina no aparece en las cartas remitidas a los interventores de Madrid, Baleares o Navarra a pesar de que estas dos últimas anotan los mayores crecimientos del gasto presupuestario (7,5% y 6,9% respectivamente), que triplican con creces el límite del 2,1%. En los casos de Baleares, Navarra y Madrid, el Ministerio de Hacienda no hace referencia ni a una mejora ni a un empeoramiento de los datos en el último mes. En el caso de Murcia, se alude expresamente a un empeoramiento progresivo.