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La calculadora de las pensiones: lo que cuestan al país y qué supone subir un 0,25%

Más allá del acalorado y apasionado debate sobre la necesaria subida de las pensiones que tanto expectación está generando en noticieros y portadas de todo el país por las manifestaciones de jubilados y el resto de pensionistas, las matemáticas en este campo son verdaderamente demoledoras.

Las cantidades dinerarias son abrumadoras. En 2017, los Presupuestos Generales del Estado destinaron 139.647 millones de euros a pensiones, casi todo para pensiones contributivas. Esto significa que el 40,7% del total que gasta el país se va a pagar las pensiones. El incremento respecto a 2016, que lógicamente pareció insuficiente a casi todos los pensionistas, supuso invertir 4.198 millones más que en 2016.

El aumento se correspondió al aumento de pensionistas y la leve subida de las pensiones prometida por el Gobierno anualmente, un 0,25% determinado por ley. En este 2018, el incremento del 0,25% supone algo más de 3.500 millones de incremento de gasto. Se trata del quinto año que las pensiones suben en este pequeño porcentaje, por debajo del coste de la vida actual, aunque también subieron ese 0,25% cuando hubo deflación, es decir, que los precios bajaron de manera general.

España afronta ya, mes a mes, el pago de 9.584.189 pensiones contributivas, 454.960 pensiones no contributivas y 194.874 prestaciones familiares. Un total de 10,1 millones de pensiones. Hace algo más de 10 años, en 2007, había 7.586.574 pensionistas. La progresión conduce a 1 millón más de pensionistas por cada 10 años, aproximadamente, con lo que se superaría a la cifra psicológica de casi 11 millones en torno al año 2030.

¿Quiénes pagan las pensiones?

Los trabajadores y demás cotizantes son los que contribuyen a las arcas públicas destinadas a pagar las pensiones, a través de la Seguridad Social.

El mes de febrero de 2018, el último contabilizado, acabó con un total de 18,3 millones de cotizantes afiliados a la Seguridad Social. Por lo tanto, la proporción de cotizantes por cada pensionista es muy baja, ya que no llega ni siquiera a dos por cada beneficiado por una pensión.

Los mensajes alarmistas sobre el negro futuro sobre el futuro del sistema público de pensiones han conseguido que en los útimos años prosperara la contratación masiva y progresiva de planes privados de pensiones.