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La OMS quiere prohibir los saludos codo con codo y recomienda el gesto masónico de llevarse la mano al corazón

El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha recordado este domingo 13 de septiembre, a través de un retuit, la recomendación que hizo el pasado mes de marzo de evitar saludarse con el codo porque no permite guardar la distancia de seguridad de 1,5 metros.

«Al saludar a la gente, es mejor evitar chocar el codo porque te pones a menos de un metro de distancia de la otra persona. A mí me gusta poner la mano en el corazón para saludar a la gente estos días», aconsejó Tedros Adhanom Ghebreyesus en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter el pasado 7 de marzo. La mano en el corazón se trata de uno de los más característicos saludos masónicos. Este gesto ha ayudado a los masones a identificarse en países que han sido hostiles a la masonería durante diferentes períodos a lo largo de los años.

Este domingo, el director de la OMS ha retuiteado un mensaje publicado por la economista Diana Ortega en el que alude en concreto al consejo de la OMS de evitar el choque de codos para saludar durante la pandemia de la covid-19.

«La OMS desaconseja saludar con el codo: lo mejor es llevarse la mano al corazón. El director de la OMS, @DrTedros, rechaza este saludo porque no se guarda la distancia de seguridad y puede haber transmisión del virus a través de la piel», reza el tuit publicado por la economista, del que se ha hecho eco el propio director de la OMS.

Origen masónico

El homenaje de la masonería al signo de la Mano sobre el Corazón puede entenderse mejor por el hecho de que los líderes de la Logia Masónica se jactan de que los ritos de la Francmasonería obedecen a la antigua religión egipcia. El Libro Egipcio de los Muertos dirigió oraciones a «El corazón de mi madre… mi corazón de transformaciones», que significa la fuente de los renacimientos.

La masonería de hoy admite libremente su conexión con la religión y los rituales del antiguo Egipto y exhibe con orgullo ídolos egipcios (la Esfinge, etc.) en y alrededor de sus instalaciones de alojamiento y en su sede internacional, la Casa del Templo en Washington, D.C.

Además, en las ceremonias rituales de los grados masónicos superiores, el panteón hindú de las deidades es honrado como la verdadera «Santísima Trinidad». En la religión hindú, se dice que todo el universo está centrado en el corazón. El Yogui, en la meditación, se dice que está escuchando el latido del corazón del universo, que es el gran corazón de Dios Shiva. Esto expresa la idea oriental básica de que la divinidad está en el corazón de cada persona, pero necesita ser «realizada» o despertada.

NOTAS

-En el Grado de los Caballeros Sublimes Elegidos, el candidato es instruido en el signo. Su mano derecha se extiende a través del pecho hasta el corazón y el pulgar está señalando hacia arriba. (Monitor de la Francmasonería de Richardson, página 147)

-En el grado de Compañero Seleccionado, el signo en el corazón se da con la mano derecha. (Monitor de la Francmasonería de Richardson, página 86)

-En el Grado de Maestro Selecto, al iniciado se le es dicho «Los signos más populares en la Masonería se hacen de esta manera: Coloque la palma de la mano derecha sobre el corazón, y pronuncie la palabra SECRETO.» (Monitor de la Francmasonería de Richardson, pág. 80)

-En el grado del Caballero del Pelícano y del Príncipe Soberano del Águila Rose Croix de Heredom, el conferenciante dirige a los miembros a «pasar al cuarto negro, los collares del 18° que son invertidos». Siguiendo esta instrucción, se da el signo de «mano derecha sobre el pecho izquierdo». (Ceremonia de iniciación secreta del decimoctavo grado)

-En el Grado del Maestro Marcos, los miembros forman y marchan alrededor de la Logia, cantando una canción. Las palabras de la canción incluyen lo siguiente: «Maestro Marcos todos aparecen ante el Jefe de Supervisión… Ustedes que han pasado el cuadrado, para sus recompensas prepararse, unan el corazón y la mano… los salarios a usted se deben, estamos a su orden.» (Ritual y Monitor Masónico de Duncan, página 161)