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¿Qué son los GDR? Por Antonio Robles

Los GDR en plena acción limpiando Barcelona de lazos amarillos. Foto: Noticiero Universal
Los GDR en plena acción limpiando Barcelona de lazos amarillos. Foto: Noticiero Universal

El acrónimo GDR, atiende a los Grupos de Defensa y Resistencia como contra espejo de los CDR, esos Comités de Defensa de la República, formados por las juventudes de Junts x Cat, ERC y las CUP.

Los primeros son pacíficos, constitucionalistas, respetuosos con el Estados de Derecho, la democracia y la ley, y los segundos, violentos, contrarios a la Constitución, al Estado de Derecho, la Democracia y la Ley, aunque su relato y discurso estén dulcemente maquillados por la no violencia, la defensa de la democracia y la república catalana. Por ejemplo, los más cuperos cortan carreteras, queman contenedores y ruedas, se enfrentan a la policía, fuerzan peajes de autopistas, mientras los que se dedican a colgar lazos amarillos o pintar la calzada se muestras insultantes, despreciativos, como si la calle fuera suya.

Gente corriente

Los GDR estás formados por descamisados, gente corriente, trabajadores de toda condición y todas las edades, mayoritariamente jóvenes y mediana edad que deben salir furtivamente de noche para limpiar los edificios públicos y el mobiliario de calles y plazas de la contaminación física y mental de plásticos amarillos, esteladas y cualquiera otra contaminación del libre pensamiento. No tocan en ningún caso los lazos y esteladas de las propiedades privadas. Entienden que la libertad de expresión les ampara, y en su ropa, su casa o sus negocios tienen todo el derecho a ejercerla. Pero nunca en Ayuntamientos o farolas, por ejemplo, porque ese espacio es de todos. Y si ellos ponen plásticos contaminantes, los demás pueden quitarlos.

Resistencia espontánea contra supremacistas

Los CDR, están formados por esta generación de separatistas y supremacistas que se han adueñado del espacio de todos para marcar el territorio como si fuera únicamente suyo. De hecho, la meada territorial es la estelada y los lazos amarillos. Las leyendas de “Llibertat presos polítics” o “Els carrers sempre seran nostras”, tienen su réplica en la de los GDR: “Las calles son de todos”.

Los GDR "limpiando" la ciudad
Los GDR «limpiando» la ciudad

Los GDR son la Resistencia espontánea y anónima de los catalanes no nacionalistas organizados en guerrillas pacíficas en nuestros pueblos y ciudades para neutralizar las acciones anticonstitucionales y violentas de los CDR. Al modo de las guerrillas, llegan de incógnito, limpian la zona elegida cuanto antes, dan la espalda a insultos y provocaciones, y desaparecen tan deprisa como llegaron, como Viriato frente a las legiones romanas. Siempre dejan constancia grabada, y a menudo son importunados por los mossos y policía local, pero cumplen la ley a rajatabla.

Solos o acompañados

Actúan en grupo o individualmente, de forma anónima e impredecible unas veces, y organizados en otras. Nadie sabe a ciencia cierta quiénes son, porque actúan de forma azarosa, improvisada, otras veces preparada en función de la actualidad y los acontecimientos. Cuando lo hacen de forma encadena, son miembros de grupos ya organizados para limpiar de lazos amarillos las instituciones públicas y el mobiliario urbano. Pero no en nombre de unas siglas, de tal o cual organización, sino acogiéndose a ese acrónimo GDR nacido de forma espontánea sin que nadie sepa a ciencia cierta quién lo ha popularizado. Hoy las RRSS son un medio muy útil para organizarse alrededor de una idea. Lo hacen los nacionalistas, pero también los no nacionalistas.

El objetivo de los GDR es neutralizar las acciones de los CDR al modo y manera del espejo de Tabarnia, es decir, para reflejar las contradicciones de los separatistas y neutralizar las acciones de los Comités de Defensa de la República. En realidad, Tabarnia ha sido el caldo de cultivo dónde han brotado de forma espontánea, y cada día se multiplican exponencialmente.

¿Por qué han aparecido varios grupos identificándose con los GDR?

Porque algunas acciones se han identificado en la prensa con grupos ya organizados. Pero ni ellos ni cualquiera otro que la prensa identifique como tal son los GDR, sino tal o cual GDR, es decir, grupos que se sienten identificados con esa filosofía. En realidad, los GDR tienen su inspiración en la leyenda del Zorro. Nadie sabe quién es, pero todos se pueden identificar con él. La perplejidad y el enigma sobre su origen y dimensiones es la naturaleza de su alma. Nadie se puede apropiar de sus siglas como nadie puede apropiarse de la Resistencia contra el nacionalismo y el separatismo. Pero todos tienen una cosa en común: la defensa de España como nación, su Estado de Derecho y su Constitución.

Su corta vida ya está plagada de agresiones por parte de los nacionalistas, y a medida que cogen relevancia social y sus acciones son más y más espectaculares, empiezan a ser criminalizados al modo y manera como solo el fascismo postmoderno nacionalista sabe hacer: descalificándolos de fachas, de mercedarios a sueldo de intereses ocultos. Direct.Cat, ha ido un paso más y se acaba de inventar una información donde en nombre de un informador inventado se pregunta quién paga a los GDR. Incluso da cifras, describe comportamientos etc. Vamos la misma asquerosa historia de siempre. No pueden vivir sin relacionar la espontánea rebelión de la gente con ese fantasma que solo ellos, los nacionalistas, se empeñan en desenterrar, Franco. No pueden soportar que gente corriente, catalanes como ellos salgan a la calle y les digan ¡Prou!, ¡basta!, en los dos idiomas de todos los catalanes.

Una legión de valientes

Algún día la basura de estos digitales, radios y televisiones alimentados por subvenciones públicas del nacionalismo institucional deberá pisar los tribunales para dar cuenta de tanta bazofia. Aunque sólo sea en los tribunales ilustrados de la historia donde la objetividad y la belleza permitan respirar a la verdad.

P.D. No he dado nombre alguno, ni de grupos ni de personas, para no facilitarles las cosas. Y recomiendo a quienes tan valiente, pero tan inconscientemente salen a cara descubierta y con el nombre por delante, hagan lo propio. Viven en un mundo dogmático donde la frustración no se tolera; y muy pronto tendrán que soportar tanta, que un tanto por ciento no resistirá la tentación de descargarla con violencia sobre lo primero que tengan a mano.  ¡Suerte, valientes!

Antonio Robles