El jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, no debe tener muy claro que quiera formar Gobierno con el apoyo de Podemos y ERC porque después de propiciar que EH Bildu entrara en la Mesa del Parlamento navarro ha vuelto a insistir en que PP y Cs deben abstenerse en su investidura.
En la que supone ya la enésima amenaza, Sánchez ha demandado su responsabilidad de partidos que se dicen de Estado para facilitar su reelección porque no hay otra alternativa y evitar así el riesgo de tener que volver a pasar por las urnas. Más exactamente, les ha emplazado a decir claramente si lo que están buscando es que se repitan las elecciones.
A lo que no ha hecho referencia este jueves el presidente del Gobierno desde Bruselas es al pacto del PSOE con Geroa Bai para que esta formación nacionalista presida el Parlamento de Navarra, beneficiando de paso que en la Mesa tenga un sitio Bildu. Este punto es determinante, ya que Pablo Casado y Albert Rivera han respondido a Pedro Sánchez que no puede exigirles su abstención en la investidura si en sus planes está contar con los que hacen homenajes a los etarras.
El líder del PP tiene muy claro con quién quiere ser investido el presidente del Gobierno y el ex líder de los populares, Mariano Rajoy, aunque no se le esperaba en el debate, también ha recordado que él planteó una gran coalición PP-PSOE para evitar el bloqueo institucional y que, finalmente, no fue posible. Del mismo modo, Rajoy no es partidario de repetir elecciones, pero propone a Ciudadanos como la fuerza con la que los socialistas sumarían para conseguir una mayoría de 176 diputados.
Mientras, Pedro Sánchez ha vuelto a hablar este jueves de Podemos como socio prioritario, pero no quiere bajo ningún concepto que Pablo Iglesias se pasee por la Moncloa los viernes para presentar sus propuestas y exponer sus ideas en el Consejo de Ministros.
El líder de Podemos se sigue haciendo ilusiones y ha opinado que los acuerdos a los que se ha llegado con los socialistas en Baleares, Canarias y La Rioja marcan el camino: Gobiernos de coalición con programa progresista.
En ERC han insistido en que no van a facilitar un Gobierno fascista, pero tampoco le van a dar un cheque en blanco a Sánchez. El portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, ha apuntado que no serán responsables de una repetición de elecciones por un fracaso de la investidura de Sánchez.
