Bank Of America Merryl Lynch cree que España «llevar a cabo un ajuste fiscal importante antes de que algunos focos de tensión como el Brexit y la guerra comercial entre Estados Unidos y China provoquen una recesión de la economía global. Según su economista jefe para Europa, Rubén Segura-Cayuela, «es más fácil hacer los deberes en la parte alta del ciclo y se nos está acabando el tiempo. Nos faltan tres puntos porcentuales de ajuste estructural».
«La alternativa es que cuando tengamos un shock hagamos un ajuste fiscal rápido y mal diseñado. Es mejor pensar ahora con cuidado cuál es el nivel de gasto adecuado, cómo lo financiamos y qué hacer para llegar», afirmó ayer, según informa Ep. A juicio de esta entidad, España ha hecho reformas en los últimos años «que estaban muy bien», pero «quedan tareas pendientes. Seguimos teniendo una economía vulnerable en muchos frentes». Segura-Cayuela apuntó en este sentido a ajustes en las pensiones, la productividad, el mercado de trabajo, la reforma educativa y la deuda externa entre las cuestiones más destacadas a atajar «con urgencia» a nivel político.
El economista de Bank of America planteó la necesidad de «decidir el tamaño del Estado del bienestar» y ver «cómo financiarlo y hacerlo más sostenible socialmente». «Cómo hacer el ajuste lo tienen que decidir los españoles votando», subrayó. Además, indicó que España tiene un problema de insuficiencia de ingresos en comparación con otros países europeos, si bien es posible tener tipos más bajos y recaudar lo mismo. En esta línea, valoró la labor de la Autoridad Fiscal, organismo que está divulgando varios informes sobre algunos de los principales focos de gasto en España. En su opinión, la AIREF está viendo dónde hay un espacio para conseguir lo mismo gastando menos. «Puede que sólo hay que rediseñar algunas cosas», pronosticó.
«El miedo es que no veo esa urgencia entre los partidos políticos», reconoció, remarcando que las mayorías parlamentarias que requerirán acuerdos de al menos tres partidos no ayudan a este tipo de reformas, aunque hacen falta grandes pactos de Estado para llevarlas a cabo.
