Inicio Economía Las pensiones subirán un 2,5 % en 2022

Las pensiones subirán un 2,5 % en 2022




El repunte de la inflación del 5,6 % en noviembre, hasta niveles no vistos en 29 años, provocará que las pensiones contributivas suban un 2,5 % en 2022 tras la puesta en marcha de la nueva fórmula de revalorización acordada por el Pacto de Toledo y que utiliza el IPC interanual promedio de doce meses para calcular el alza, lo que se traduce en un repunte de unos 26 euros mensuales de media.

En todo caso, habrá que esperar a conocer el dato definitivo del IPC de noviembre, que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicará el próximo 15 de diciembre, para confirmar el porcentaje exacto de subida de las pensiones de 2022, aunque los datos definitivos de IPC apenas suelen variar, si acaso alguna décima arriba o abajo. De ser así, la cifra se situará en niveles similares a 2009, cuando las pensiones contributivas crecieron un 2,4 %.

Esta subida en la inflación del 2,5 % es medio punto superior a la estimada por el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que habían concretado una partida de 171.165 millones de euros para este fin, por lo que el montante final destinado deberá ser superior al inicialmente previsto en las cuentas anuales. Según los cálculos de Funcas, esta revalorización podría suponer un gasto adicional de más de 3.000 millones de euros.

Además, el repunte de los precios también obligará al Ejecutivo a ajustar la denominada paguilla, la compensación puesta en marcha para compensar a los pensionistas por el desfase de las previsiones. Así, el 0,9 % estimado inicialmente se quedará muy lejos del dato final con el que concluirá el año y ascenderá según las estimaciones al 1,6 %, por lo que el Gobierno deberá destinar unos 2.000 millones de euros más a pagar estas cantidades.

Unos 26 euros mensuales de media

De cumplirse estas previsiones, los 8,9 millones de pensionistas comenzarán el año con una subida de unos 26 euros mensuales de media, teniendo en cuenta que la pensión media en noviembre -jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares- se situaba en los 1.038,49 euros, según los datos del Ministerio de Seguridad Social. Así, la prestación media rozaría los 1.065 euros mensuales o, lo que es lo mismo, unos 365 euros más anuales -ya que las prestaciones contributivas se perciben en 14 pagas al año-, a los que habría que añadir la aludida paguilla que recibirán a comienzos de 2022 por la desviación de la inflación de este año.

El aumento será mayor para los 6,1 millones de jubilados en España, cuya pensión media se situaba en octubre en los 1.194,94 euros. En caso de finalizar con una inflación media del 2,5 %, el incremento ascenderá hasta los 30 euros, lo que elevará la prestación hasta los 1.225 euros, 420 euros más al año. Mientras que los casi 2,4 millones de ciudadanos que reciben una pensión por viudedad, de 742,35 euros de media, ganarían uno 19 euros más al mes.

Por su parte, según los cambios aprobados por el Gobierno, las pensiones mínimas y no contributivas no se revalorizarán con la inflación y subirán en un porcentaje fijo del 3 % en 2022, independientemente del resultado del IPC a final de año. Esta medida afecta a un total de 2,2 millones de personas que cobran actualmente una pensión mínima, así como a los 446.000 beneficiarios de una prestación no contributiva –aquellos que no han podido cumplir los requisitos de cotización exigidos para las pensiones contributivas y que, de otra forma, se quedarían desprotegidas-. No obstante, todo dependerá de su aprobación final en el Congreso.

La reforma sigue su trámite en el Congreso

La revalorización de las pensiones en función del IPC forma parte de la primera ‘pata’ de la reforma de las pensiones que se encuentra en tramitación en el Congreso. La pasada semana, la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Congreso avaló la norma con los votos del PSOE, Unidas Podemos, Esquerra Republicana, el PNV y Compromís, y la abstención de EH-Bildu, de forma que el proyecto queda listo para su debate y votación en el Pleno.

Tras su paso de la ponencia, el proyecto incorpora el nuevo mecanismo de equidad intergeneracional (MEI), que prevé un aumento temporal de las cotizaciones a la Seguridad Social de 0,6 puntos durante diez años, entre 2023 y 2032, para llenar el Fondo de Reserva de cara a la jubilación de las generaciones del ‘baby boom’. Otros cambios incorporados en fase de ponencia es la ampliación en el acceso a la pensión de viudedad por parte de las parejas de hecho, y el reconocimiento de un complemento a la pensión para carreras de cotización de 40 años que no alcancen 900 euros.

Precisamente la reforma de las pensiones es uno de los compromisos del Gobierno con la Comisión Europea para que lleguen los fondos europeos e implica que esté aprobado antes de final de año. El comisario de Empleo de la UE, Nicolás Schmit, aseguró en RNE que está convencido de que así será.