Renfe ha puesto en marcha hoy el proceso para renovar su flota de trenes de media distancia. Su consejo de administración ha aprobado la licitación de compra de hasta 105 trenes de media distancia (43 en firme y 62 opcionales) destinados a los servicios dentro del contrato de Obligaciones de Servicio Público (OSP), por un importe de 750,878 millones de euros, según ha informado la compañía.
En total, incluyendo la adquisición de piezas de parque, el mantenimiento integral de parte de los trenes adquiridos durante 15 años el utillaje y el almacén inicial necesarios para dicho mantenimiento, así como opciones adicionales de suministro y mantenimiento, la licitación asciende a 1.322,4 millones de euros. El mantenimiento se realizará a través de una sociedad mixta con Renfe Fabricación y Mantenimiento.
Los trenes que adquirirá la operadora pública serán eléctricos e híbridos. Estos últimos dispondrán de un coche generador para la tracción en vías no electrificadas y permitirán a la compañía cubrir los periodos transitorios hasta que las líneas estén electrificadas.
El objetivo principal de la licitación es la renovación del parque de material rodante de Renfe, ya que casi el 50% actual ha alcanzado el final de su vida útil o bien lo hará en los años de vigencia del contrato. La previsión es empezar a recepcionar las primeras unidades a partir de los 42 meses desde el envío de la carta de adjudicación.
