Suecia decidió mantener la orden de arresto contra Assange por delitos sexuales. AP / ARCHIVO
- Destacan que desde 2012 han buscado alcanzar una solución satisfactoria para todas las partes
El país reafirma su intención de salvaguardar la integridad física hasta que el fundador de WikiLeaks llegue a un lugar seguro
QUITO, ECUADOR (16/SEP/2016).- Ecuador ratificó la vigencia del asilo concedido al fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange, luego que una corte de apelaciones de Suecia decidió mantener la orden de arresto que pesa en su contra por delitos sexuales.
«Ecuador ratifica la vigencia del asilo concedido a Assange hace cuatro años, y se reafirma en su intención de salvaguardar su integridad física y su vida hasta que el asilado llegue a un lugar seguro», puntualizó la cancillería ecuatoriana en un comunicado.
Asimismo, la dependencia confirmó la validez de las conclusiones del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas, que consideró que Assange -asilado en la embajada de Ecuador en Londres- permanece detenido en forma arbitraria y debe ser liberado inmediatamente.
La cancillería destacó además que, desde junio de 2012, Ecuador ha buscado garantizar el «debido proceso, evitar dilaciones innecesarias y alcanzar una solución satisfactoria para todas las partes», de acuerdo con un despacho de la agencia oficial Andes.
Ecuador manifestó su postura luego que la Corte de Apelación de Svea (Suecia) desestimó este viernes el recurso presentado en agosto pasado por los abogados de Assange para revocar la orden de arresto en su contra.
Assange, de 45 años, fue detenido en Londres en diciembre de 2010 a petición de Suecia que exige su extradición para juzgarlo por presuntos delitos sexuales.
Liberado bajo fianza y tras agotar todos los recursos para evitar la extradición, el fundador de WikiLeaks pidió asilo en la embajada de Ecuador en Reino Unido el 19 de junio de 2012, donde permanece hasta la fecha.
Según Assange, detrás de los cargos en su contra se encuentra Estados Unidos, que busca juzgarlo por la difusión en WikiLeaks de miles de documentos militares clasificados y cables diplomáticos del gobierno de Washington.
