El fiscal Alfonso Vélez manifestó que la red contaba con esos equipos porque la señal telefónica es baja e intermitente en los predios de la Refinería del Pacífico.
“Los equipos de comunicación serán analizados junto con 22 celulares decomisados en la operación, con el fin de extraer toda la información y determinar cómo estaba estructurada la organización”, expresó el fiscal.
El juez ya autorizó a los policías de la Unidad de Criminalística a que abran los equipos y realicen una pericia denominada “triangulación de llamadas”, que consiste en verificar el contenido de los mensajes de texto y diálogos escritos en aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp, Facebook Messenger y Telegram.
Esta última aplicación es usada en otros países por narcos debido a que maneja información encriptada, cuyo sistema protege la comunicación a través de un lenguaje secreto que puede ser descifrado a través de un código.
Los narcos recurren a ese sistema para despistar a la Policía.
El fiscal reveló que también revisarán los contactos de los 22 celulares para determinar si existen llamadas internacionales. “Además se hará extracción de fotografías, videos y notas de voz para dar con toda la organización”, agregó el funcionario.
La supuesta red estaba conformada por nueve hombres, quienes fueron detenidos el lunes en la madrugada tras el aterrizaje de una avioneta en una vía dentro de la Refinería del Pacífico.
La nave logró despegar, y las autoridades presumen que llevaba posiblemente una carga de droga, debido a que en el lugar del aterrizaje hallaron una escalera, varios sacos, 16 canecas con combustible para aviación y 40 luces que iluminaban la pista clandestina.
Actualmente los involucrados son investigados por tráfico de armas y enriquecimiento ilícito, porque los uniformados incautaron 12 armas y 157 mil dólares en efectivo.
“Pero como existe la presunción del aterrizaje de la nave he pedido abrir una tercera investigación en contra de los detenidos por el delito de narcotráfico, para esclarecer cuál era la ruta de la avioneta”, enfatizó el fiscal.
Esta última investigación busca conocer el destino final de la nave y qué tiempo tenía la presunta organización usando la Refinería como pista de aterrizaje. Con este proceso además se pretende saber bajo qué circunstancia reclutaron a los tres guardias detenidos, quienes supuestamente permitían el acceso de varias camionetas, lo cual tenían prohibido porque el paso está restringido.
Los guardias presos son Estuardo Z., Oscar P. y Jhonny C. Todos son de la comuna El Aromo, ubicada a 45 minutos en carro desde el centro de Manta.
Vigente. Este operativo, además, dejó detenidos al policía en servicio activo Elton A. y al policía en servicio pasivo José B., quien fue dado de baja hace varios por años por estar involucrado en otro delito.
Ellos fueron apresados junto con los presuntos narcos Eddie M., Kevin C., Luis Z. y Jaime M. Todos fueron capturados en un enfrentamiento armado con la Policía mientras la avioneta despegaba de la Refinería.
Durante el cruce de balas resultó herido el expolicía José B., con un disparo en el brazo.
El fiscal criticó a los abogados de los sospechosos por afirmar que estos fueron golpeados y les violaron sus derechos.
“Ellos resultaron heridos porque, al momento de atacar a los policías con balas, los agentes realizaron una maniobra ofensiva logrando volcar la camioneta donde viajaban los implicados. Es por el accidente de
tránsito que ellos resultaron golpeados”, explicó.
El abogado Jimmy Cajas dijo que pedirá investigar el presunto abuso que sufrieron sus siete defendidos, porque cree que fueron torturados.
Mientras que el abogado Lenin Zambrano, quien defiende a los policías detenidos, manifestó que fueron maltratados a patadas.
“Aquella agresión fue confirmada con la versión que rindieron mis defendidos ante el juez”, expresó Zambrano.
Los detenidos declararon en la audiencia que fueron agredidos de forma violenta por los policías, pero evitaron revelar qué hacían en la Refinería, cómo ingresaron, quién les permitió el paso y qué llevaba la avioneta.
Zambrano mencionó que los detenidos decidieron hablar con precisión solo del maltrato para demostrar que la aprehensión fue arbitraria.
Sobre qué hacían dentro de la Refinería no dieron detalles, porque se acogieron al derecho del silencio.
Los nueve implicados fueron capturados en un operativo de inteligencia que hizo la Unidad de Investigación Antinarcóticos (UIAN) mientras buscaba detectar vuelos clandestinos en los predios de la Refinería.
