Primero fue un estruendo y luego escucharon gritos provenientes de la calle, expresó Adrián Zambrano, una de las personas que salió presuroso de su casa para prestar ayuda a los accidentados.
El percance, según dijo, se suscitó alrededor de las 15h30 en el sitio Las Maravillas, kilómetro 90 de la vía San Plácido-Pichincha.
En un principio, dijo el agricultor, no entendía lo sucedido debido a que no había nadie en la carretera y los gritos se originaban desde los potreros cercanos.
Entonces, al mirar se dieron cuenta de varios cuerpos esparcidos entre la maleza, así como un automotor al fondo de la quebrada. “Así que nos organizamos para ayudar mientras se informaba a los bomberos de lo acontecido”, citó.
Ayuda. Willian Mera, del Cuerpo de Bomberos de Portoviejo, manifestó que al arribar al lugar del accidente se encontraron con la voluntad de los comuneros, quienes no dudaron en apoyar la tarea de rescate.
Precisó que, en efecto, el vehículo a su paso fue dejando a parte de los pasajeros, hasta que finalmente llegó al fondo del abismo, con una profundidad aproximada a los 80 metros.
La camioneta de color negro, doble cabina y placa MBA-9740, dio vueltas de campana y terminó con las llantas hacia arriba.
La estructura resultó seriamente afectada, así que al rodar, parte de sus pasajeros se fueron quedando en el trayecto.
Drama. Wilfrido Macías, otra de las personas que colaboró en las tareas de rescate, precisó que sintió que su alma se le partía al encontrarse con el cuerpo sin vida de la niña, quien quedó a pocos metros de la carretera.
“Era como ver a uno de mis hijos. Eso nunca lo olvidaré”, citó.
Metros más abajo, añadió, encontraron a cuatro heridos entre el pasto.
La víctima adulta, agregó, quedó en el vehículo siniestrado. Ella fue sacada con los socorristas que llegaron al sitio tras la coordinación del ECU-911.
En el descenso hasta el sitio mismo donde quedó el automotor quedaron prendas de infantes en la maleza; así como dulces en tarrina que seguramente compraron los viajeros para servirse en el trayecto
Socorro. Ángel Vera, jefe del Cuerpo de Bomberos del cantón Pichincha, expresó que por la premura del tiempo y la emergencia se vieron en la necesidad de evacuar a los heridos hasta un hospital de la capital provincial para ganar tiempo, ya que por lo general los heridos son socorridos primero en el hospital local y luego derivados al Verdi Cevallos de Portoviejo.
Extraños. Ante rumores de tratarse de conocidos comerciantes de Pichincha, curiosos arribaron al sitio para saber sus identidades, pero no fueron reconocidos, confirmando así que los accidentados no habitan en este sector de la provincia.
Trascendió además que los accidentados habían acudido a una comunidad cercana para ser parte de un velorio y luego se trasladaban a Portoviejo.
Peritos. En el lugar del suceso se hizo presente personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (Siat) de la Policía para recabar información.
La camioneta antes de caer al abismo habría golpeado contra una baranda.
